El abstencionismo fue el ganador en las votaciones realizadas este domingo 7 de noviembre. Según el organismo de observación ciudadana Urnas Abiertas (UA), aproximadamente el 81 por ciento de nicaragüenses aptos para votar, decidieron no avalar el proceso tildado de “viciado de origen”, por considerar que no cumplió con los estándares necesarios de transparencia y credibilidad.
A las 10 de la noche del domingo Urnas Abiertas reveló que, de acuerdo con un proceso de observación nacional realizado en 563 Centros de Votación (CV), con la participación de 1.450 observadores ciudadanos, la abstención en las votaciones oscila entre el 79%, como mínimo, y el 84% como máximo y un promedio nacional del 81.5%. Es decir, al menos 81 de cada 100 nicaragüenses habilitados para votar no acudieron a las Juntas Receptoras de Votos (JRV).
“El abstencionismo es la muestra clara de que la población exige elecciones libres y justas. Estas cifras están haciendo hablar al soberano de que se quieren unas elecciones inclusivas. Solo salieron a votar los militantes y trabajadores del Estado”, expuso el observatorio.
LEA TAMBIÉN: Urnas Abiertas denuncia anomalías y hechos de violencia en las votaciones
El segundo informe del organismo de monitoreo electoral detalla que las votaciones fueron la culminación de “un proceso electoral que debe considerarse viciado de origen y, por tanto, ilegítimo”, en el que se han reportado anomalías y violencia política desde todos los departamentos y las regiones autónomas del país y, de por lo menos, 119 de los 153 municipios del territorio nacional.
Ligia Gómez, una de las profesionales del equipo de Urnas Abiertas que trabajó en el muestreo explicó que los resultados del informe son confiables porque utilizaron parámetros estadísticos y metodológicos científicos.
Fueron visitadas y observadas 563 Centros de Votación (CV), que representan el 18% de los 3106 instalados en todo el país. Realizaron tres muestras separadas que abarcaron los 563 CV. El personal que colaboró se desplazó a los 17 departamentos del país y las dos Regiones Autónomas. En total fueron monitoreados 153 municipios y 7 distritos de Managua.
LEA TAMBIÉN: Biden: “Ortega y Murillo han orquestado una pantomima de elecciones que no han sido ni libres ni justas”
Los observadores independientes se tuvieron que movilizar de forma clandestina para poder hacer su trabajo. Estuvieron en los lugares habilitados para votar, entre las siete de la mañana y las seis de la tarde, hora programada para el cierre de los recintos electorales.
De acuerdo con los datos recopilados desde los CV, la organización estimó que la “banda de participación ciudadana», es decir, la cantidad de personas que asistieron a ejercer el voto, se registra entre el 16 por ciento, como mínimo, y el 21 por ciento como máximo y con un promedio nacional del 18.5% de participación.
De ese cálculo se desprende que “la abstención está entre el 79%, como mínimo, y el 84% como máximo; con un promedio nacional del 81.5%”.
“Este nivel de abstencionismo es histórico, ha hablado el soberano (el pueblo) que ha dicho claramente que lo que exige es elecciones democráticas, libres y justas”, dijo Olga Valle, de UA.
VIOLENCIA POLÍTICA EN LAS VOTACIONES
En lo referido a las incidencias y anomalías reportadas durante el día de votaciones, el organismo recibió informes desde 890 centros de votación de todo el país.
El acto de violencia política reportada con mayor frecuencia, según detalla el segundo informe de Urnas Abiertas, fue la presencia de paramilitares en los alrededores de los Centros de Votación.
El nivel de intimidación fue tal que en Estelí, de acuerdo con denuncias recibidas por la organización, civiles encapuchados estuvieron pidiendo la cédula de las personas antes de ingresar a los lugares de votación.