Cuando falta pocas horas para la auto investidura del dictador Daniel Ortega y Rosario Murillo, el presidente argentino Alberto Fernández, echó un pie atrás y fuentes cercanas al gobierno sudamericano declararon que no enviarán ninguna delegación oficial al acto que se llevará a cabo este lunes 10 de enero en la Plaza de la Revolución.
El viernes 7 de enero, cuando en Buenos Aires, Fernández asumía la presidencia Pro Tempore de la Comunidad de Estados de América Latina y el Caribe (Celac), en Managua embajador de Argentina, Daniel Capitanich, declaró al diario La Prensa que una delegación de su gobierno estaría presente en la toma de posesión de Ortega.
“Estamos a la espera de la confirmación de la espera de la persona que asistirá en representación de la Argentina. Asistirá alguien del ámbito del gobierno, pero no podría confirmar quién será la persona”, expuso Capitanich a La Prensa.
El diario argentina El Clarín en su sitio web explicó el sábado que una fuente cercana al canciller Santiago Cafiero confió que el único representante que estará es Capitanich. «El único representante argentino que va «es él», dijo la fuente a El Clarín.
El diario indica que la fuente diplomática indicó que al parecer el embajador se habría «confundido» o querido «decir otra cosa».
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UCR LLAMA A FERNÁNDEZ A RENUNCIAR A DEFENDER LOS DERECHOS HUMANOS
Mientras el comité nacional del partido Unión Cívica Radical (UCR) de Argentina emitió un comunicado este sábado donde le piden a Fernández, ahora que ocupa la presidencia de la Celac que «la Argentina no debe renunciar a la política de derechos humanos y de defensa y promoción de la democracia» en clara alusión a Nicaragua, Venezuela y Cuba.
«Es urgente que el Presidente haga cumplir los consensos logrados en esa organización respecto a la vigencia de la democracia y los derechos humanos en sus países y se apliquen las sanciones correspondientes a los que persiguen opositores y no garantizan elecciones libres, sin proscripciones y sin fraudes», expuso la UCR en su comunicado.
El viernes durante la reunión de la Celac Colombia criticó los «silencios» ante las violaciones de derechos humanos en «al menos tres de los países» de la región, sin mencionar nombres.
«No podemos tener silencios oportunistas frente a valores fundamentales, que lo fueron y serán siempre en todo lugar, como la defensa de la democracia, las libertades y los derechos humanos», señaló la viceministra de Asuntos Multilaterales de Colombia, María Carmelina Londoño, al leer un discurso escrito por la vicepresidenta y canciller, Marta Lucía Ramírez, quien no pudo asistir en persona a esta XXII reunión de cancilleres celebrada en Buenos Aires.
Mientras Fernández en su discurso apuntó que «la Celac nació como un foro en favor de nosotros mismos, que siempre promovió el consenso y la pluralidad en un marco de convivencia democrática sin ningún tipo de exclusiones».
Ortega asumirá su nuevo mandato en medio del rechazo de la comunidad internacional debido a la falta de transparencia en los comicios del pasado 7 de noviembre, además eliminó la competencia de la boleta electoral a sus principales rivales enviándolos a prisión e ilegalizó a tres partidos políticos.