Michael Healy ha asumido la presidencia del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep) en medio de una marcada división interna. Ayer, las cámaras que apoyaron la candidatura de Mario Hanon se abstuvieron de competir por cargos directivos, dejando en manos del ala Healy seis puestos, entre ellos tres vicepresidencias.
Pese a eso, las cámaras empresariales están dispuestas a trabajar con Healy en aras de lograr la unidad del sector privado nicaragüense, que por primera vez en los últimos trece años tiene un nuevo rostro, tras el término de la era de José Adán Aguerri. A priori, cuatro gremiales consultadas por Despacho 505, identifican las reforma a los estatutos del Cosep como uno de los puntos más importante a abordar.
Las cámaras que apoyaron a Hanon reiteran que Healy debe poner fin a la reelección en el Cosep y dar paso a una alternancia que promueva una horizontalidad, de modo que el presidente no centralice todas las demandas de las 26 gremiales que lo conforman.
“Lo primero y que ambos candidatos se comprometieron es reformar los estatutos del Cosep porque tiene muchos vacíos y realmente no está bien constituida la gobernanza, está demasiada vertical y centralizada, y ver el tema de la reelección”, dice la presidenta de la Cámara de Comercio y Servicios de Nicaragua (CCSN), Carmen Hilleprandt.
Hilleprandt, que apoyó la campaña de Hanon, también ve importante que Healy se gane la confianza de las cámaras que no votaron por él. “Es importante unir al sector empresarial”, expresa, a la vez que menciona que el Cosep debe retomar temas que ha dejado descuidado como los derechos de las empresas, buscar una reactivación económica, libertad empresarial.
El presidente de la Cámara de Industria de Nicaragua (Cadin), Marcos Pierson, y la presidenta del Instituto Nicaragüense de Desarrollo (INDE), Ximena González, coinciden también en que la agenda que Healy presentó como candidato es la que debe marcar la línea de su presidencia a partir de ahora. “ Primero es la descentralización de las cámaras, que las decisiones no estén centralizadas en el presidente, la reforma de los estatutos para asegurarnos que corregimos algunos puntos como la prohibición de la reelección”, afirma Pierson.
Healy cuando cabildeó el voto de las cámaras se comprometió a reformar los estatutos, promover la participación descentralizada de las cámaras e incorporar a los jóvenes, facilitar la generación de empleos e inversión y promover la unidad del sector privado. Ayer finalmente fue electo con 14 votos, incluidos el de José Adán Aguerri.
DIÁLOGO SÍ, PERO NO A PUERTAS CERRADAS
Healy hace dos semanas se mostró de acuerdo en que el sector privado tenga un acercamiento con el régimen de Daniel Ortega para abordar los principales problemas que afronta como la reforma tributaria, que ha provocado el cierre o achicamiento de las empresas nicaragüenses.
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Sin embargo Aguerri le sugirió al presidente electo que no se acerque al Gobierno porque la solución económica pasa por una solución política a la crisis que vive el país desde abril de 2018. De las cuatro cámaras consultadas por Despacho, tres dijeron apoyar un posible diálogo, eso sí, diferente al que se mantuvo hasta abril de 2018.
“Se tiene que ver en el seno del Consejo Directivo del Cosep, si nosotros pagamos tributos tenemos derechos, no podés dejar los derechos de un lado, una cosa es derecho y otra cosa privilegios. Se tiene que definir qué tipo de acercamiento. No es lo mismo el acercamiento que había en el modelo anterior que se reunían a puertas cerradas”, manifestó Hilleprandt.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de Urbanizadores de Nicaragua (Cadur) expresó que se debe definir qué tipo de acercamiento será con el régimen, pero al igual que sus homólogos lo considera importante para poder reactivar la economía.
“Es un tema complejo. Nosotros creemos que se debería retomar un diálogo con el Gobierno. Sin diálogo no vamos a salir de este conflicto, no te puedo decir parámetros porque depende de la disponibilidad de ambas partes. Mike planteaba una mesa de diálogo de todo el empresariado, debe ser lo más inclusivo posible”, explicó.
Al expresidente Aguerri se le cuestionó haber liderado un matrimonio con la dictadura de Daniel Ortega que puso por encima de la institucionalidad, la rentabilidad económica. Incluso, la exembajadora de Estados Unidos en Managua, Laura F. Dogu, en octubre de 2018 llamó a los empresarios a que terminaran el modelo de élites y caudillos, pues era clave para construir un futuro sostenible para el país.
“La comunidad empresarial valoraba más la estabilidad que la sostenibilidad. Creían que el crecimiento económico traería oportunidades”, emplazó la diplomática estadounidense en un momento que el país estaba sumido en una violencia política sin precedentes en los últimos 30 años.
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La presidenta del INDE no respondió si apoyaría un posible diálogo, pero dejó claro que se debe promover la recuperación económica con la misma importancia que tiene la institucionalidad democrática del país, mientras tanto el presidente de Cadin señaló en días recientes a este medio que no se debe negociar, al contrario demandar los derechos de las empresas.
APOYO A LA ALIANZA, EN VEREMOS
El apoyo a la Alianza Cívica es un tema en el que las presidentas de las cámaras prefieren no opinar. José Adán Aguerri es miembro de la Alianza Cívica y representaba ahí al sector empresarial junto con Michael Healy y Álvaro Vargas, pero ahora no está claro qué rol jugará el Cosep. A lo interno, desde antes de la elección, se discutía si debía seguir entre ese grupo compuesto por diversos sectores sociales y que fue conformado por la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN) para el Diálogo Nacional de mayo de 2018.
“Sobre el respaldo a la Alianza no hemos hablado y preferiría no opinar”, señala la presidenta del INDE. “El apoyo del Cosep a la Alianza tenemos que irlo discutiendo conforme pasan los meses, el Cosep tiene un rol importante que jugar y puede aportar a cuáles deben ser las reformas que necesita el país, dijo el presidente de Cadin.
Healy declinó seguir como miembro del consejo ejecutivo de la Alianza para centrarse en conseguir la presidencia del Cosep, pero continúa como como coordinador de la Comisión de Inclusión.
Algunos empresarios creen que el Cosep debe mantenerse en la Alianza y pujar porque se logren reformas electorales, sin embargo deberá retirarse cuando llegue el momento de nombrar candidatos a la presidencia de la República. “No somos partido, no vamos a nombrar un candidato, apoyaremos a un candidato”, considera Marcos Pierson.
Algunos dirigentes políticos del país han criticado a la Alianza Cívica por “estar controlada” por el empresariado nicaragüense y porque supuestamente los empresarios pretenden que establezca una alianza electoral con el partido Ciudadanos por la Libertad de Kitty Monterrey.
Expresidente del Cosep: El reto es unificar a las cámaras
Adriana Gutiérrez
Para el expresidente del Cosep Erwin Krünger, el primer reto del nuevo presidente Michael Healy es consolidar el Cosep, unificar y definir en consenso con las Cámaras un plan de acción y atender los desafíos que tiene el país, sobretodo ahora, en el contexto de la pandemia.
«La salud es importante, y después de eso hay que atender las políticas económicas, la sobrecarga fiscal que tiene paralizado y debilitadas a muchas empresas y tratar de salir de esta depresión cuanto antes», señala.
Krunger enfatiza que hay «que ver cómo se logra que la clase política se ponga los pantalones y dé buenas opciones democráticas el próximo año en elecciones para que no nos mantengamos siempre en una democracia representativa con respeto a la institucionalidad del país”.
Con respecto a algunas confrontaciones internas en el Cosep y varios presidentes de las Cámaras, Kruguer mencionó que elección ya pasó, fue un gran logro y ejercicio democrático.
«En un organismo democrático siempre hay estas divergencias. Sólo en las dictaduras no hay. Habrá que apoyar al nuevo presidente y esperar sus planteamientos y la reacción de las Cámaras», finaliza.