La empresa estatal Unión Eléctrica (UNE) prevé este sábado apagones simultáneos en cerca del 24% de Cuba en el horario de mayor consumo, en la tarde-noche.
Los cortes en el servicio eléctrico son frecuentes en el país caribeño por la grave crisis que sufre desde hace meses su sector energético, la cual empeoró después del impacto del huracán Ian en septiembre pasado por el extremo occidental de la isla.
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La UNE calcula para el horario pico de este sábado una capacidad de generación eléctrica de 2.419 megavatios (MW) y una demanda máxima de 3.080 MW. El déficit -la diferencia entre oferta y demanda- será de 661 MW y la afectación -lo que se desconectará realmente- se ubicará en los 731 MW.
El Gobierno cubano anunció que trataría de reducir las afectaciones por los apagones para final de año mediante un plan que combina reparaciones y nuevas inversiones.
Las principales causas de la actual crisis energética son las roturas y averías en las anticuadas plantas termoeléctricas, la falta de combustible y los mantenimientos programados, según el Gobierno.
La mayor parte de las ocho centrales terrestres de Cuba operan con más de 40 años de explotación, cuando la edad media es de los 30 años. Los mantenimientos han sido deficientes también.
En los últimos tres años el Gobierno cubano ha rentado hasta siete centrales eléctricas flotantes a una empresa turca para paliar la falta de capacidad de generación. La última llegó hace apenas dos semanas a la bahía de La Habana y está aún en el proceso de conexión al Sistema Eléctrico Nacional (SEN).
Los cortes en el suministro eléctrico afectan la actividad económica del país y la vida diaria de los cubanos, lo que ha generado descontento social y protestas espontáneas en los últimos meses.
Los apagones fueron uno de los principales motivos tras las manifestaciones contra el Gobierno del 11 de julio del año pasado, las mayores en décadas, así como las registradas después del huracán Ian, cuando buena parte de la isla se quedó sin corriente durante una semana.
