???? La Podcast: Del asesinato de Samuel en España al blanqueamiento de la LGTBIfobia
Las agresiones físicas que sufrimos día a día y las violaciones a los derechos humanos en nuestro colectivo, son producto del discurso de odio que legitima esta violencia y también del sistema heteropatriarcal que se sigue fomentando en nuestras sociedades.
- July 13, 2021
- 01:04 AM
- Despacho 505
- Copyright Despacho 505
Las opiniones aquí planteadas son de entera responsabilidad de quienes las expresan y no representan la línea editorial de DESPACHO 505.
En pleno mes de la conmemoración de los disturbios de Stonewall de 1969, lo más importante es recordar que muchas personas de la comunidad LGBTIQ+ seguimos siendo asesinadas, perseguidas y atacadas por el simple hecho de ser lesbianas, gays, bisexuales o trans, como por ejemplo el asesinato de Samuel en A Coruña, España la madrugada del sábado 3 de julio del 2021. Samuel recibió una brutal paliza perpetrada por un grupo de jóvenes que le atacaron por el simple hecho de ser gay.
La celebración o conmemoración del Día de Orgullo, en los países en los que se puede celebrar, no debería ser una actividad vacía de contenido y de lucha verdadera, ya que hay que recordar también que un país o una sociedad puede retroceder en cuanto a derechos alcanzados y peor aun, lo que ocurre en países europeos, en donde ya se está permitiendo el ascenso al poder a ideologías como el fascismo y la ultraderecha, que promueven el odio y la violencia hacia el colectivo LGBT, las mujeres, los inmigrantes, entre otros.
Ya no digamos la criminalización y la LGTBIfobia de Estado que existe en países latinoamericanos, como es el caso de Nicaragua, o peor aún el blanqueamiento del machismo, la LGTBIfobia, discriminación y xenofobia que se instauran en muchos países en los que la religión como poder fáctico aun tiene mucha influencia, asimismo en países con altos niveles de corrupción en el Gobierno, los regímenes autoritarios e incluso en los países en los que se supone que se ha alcanzado cierto nivel de democracia.
Y es que las agresiones físicas que sufrimos día a día y las violaciones a los derechos humanos en nuestro colectivo, son producto del discurso de odio que legitima esta violencia y también del sistema heteropatrialcal que se sigue fomentando en nuestras sociedades.
En muchos de los países en donde ser homosexual ya no es penalizando, en la práctica, se sigue asesinando. Estos gobiernos y políticos, escondidos detrás de una supuesta defensa de “valores cristianos o religiosos”, o de moralismo mal construido hacen lo imposible por impedir la visibilización de la diversidad y por supuesto discriminar a la comunidad LGBTIQ+.