Laura Chinchilla afirma que Costa Rica afronta con madurez unas elecciones atípicas
El domingo estarán convocados a las urnas 3,5 millones de costarricenses para escoger al presidente y los 57 diputados.
- February 05, 2022
- 05:00 AM
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La expresidenta de Costa Rica Laura Chinchilla reconoce en una entrevista con Efe que este domingo su país celebrará unos comicios atípicos, por la emergencia sanitaria y la multiplicación de candidatos, pero destaca que el proceso electoral evidencia la madurez democrática del país y que la mayoría de los aspirantes se ha centrado en los problemas económicos.
"Pese a las particularidades del proceso, en comparación con otros países estamos enrumbándonos con mucha normalidad a las elecciones. Hay un ambiente bastante maduro, de discusión, de debate intenso, de respeto, un ambiente armonioso", manifestó Chinchilla en una entrevista desde China, en donde se encuentra como integrante del Comité Olímpico Internacional (COI) en los Juegos Olímpicos de Invierno.
La expresidenta agregó que "hay una oferta electoral muy grande y hasta ahora lo único que tenemos seguro es que va a haber una segunda vuelta".
Según las encuestas es casi inminente una segunda ronda para abril próximo entre los dos candidatos más votados, pues en las mediciones hechas ninguno está cerca del 40 % de apoyo necesario para un triunfo en primera vuelta este domingo.
La única mujer que ha gobernado Costa Rica (2010-2014), quien no podrá votar el domingo por su compromiso con el COI, comentó que el proceso electoral de Costa Rica se ha desarrollado en condiciones atípicas como la pandemia de la covid-19 que ha generado una crisis sanitaria y económica, pero que también ha producido en el país "disrupciones en materia política".
"Esa dispersión tan grande de 25 candidatos ha dificultado que la gente tome una decisión. Ha sido mucho más difícil para la gente no solo porque hay muchos candidatos, si no porque la gente en esta crisis está tratando de resolver temas de subsistencia, económicos y laborales", comentó.
A pesar de este contexto, la expresidenta considera que la gente acudirá a las urnas en las proporciones que siempre se observan en los procesos electorales del país.
Para Chinchilla, uno de los puntos positivos de la campaña es que los candidatos se han centrado en discutir sobre los problemas económicos del país y sus posibles soluciones.
"Esta campaña es más sana que la anterior (del 2018) porque la anterior se enfocó en un único tema (derechos de la población sexualmente diversa), que si bien era muy relevante porque tenía que ver con derechos humanos, no permitió a la gente exigir a los candidatos posiciones claras sobre otros temas igualmente urgentes como ya lo era la economía", declaró la exmandataria.
Entre los temas más urgentes por resolver en el país se encuentra el desempleo que ubica en un 14%, y que afecta en mayor medida a los jóvenes y las mujeres, además del empleo informal que alcanza el 44 %.
Chinchilla dijo que en la población hay un "desencanto con la política y con instituciones", lo que se ve reflejado en datos que citó del estudio Latinobarómetro, que indican que el 90 % de los costarricenses cree que los gobiernos no están tomando decisiones que favorezcan realmente al pueblo.
"La buena noticias es que Costa Rica sigue siendo un país con los más altos indicadores de desempeño en América Latina en democracia, derechos humanos, libertad de expresión, atracción de inversiones, apertura de la economía", comentó la expresidenta.
Chinchilla reconoció que su país sí se ha quedado rezagado y perdiendo dinamismo en "el ordenamiento de variables macro como las finanzas públicas", aunque reconoció que en el actual Gobierno de Carlos Alvarado han habido avances al respecto.
Durante el mandato de Chinchilla Costa Rica comenzó el proceso de adhesión a la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE), el cual culminó 9 años después, en 2021, tras aprobadas una serie de reformas legislativas, lo que le hubiese gustado que se hiciera más rápido .
Chinchilla prevé que el próximo presidente que gobernará Costa Rica entre 2022 y 2026, deberá tener grandes dotes de negociación y una visión clara, pues lo más probable es que de las elecciones de este domingo surja un fraccionamiento importante de fuerzas en la Asamblea Legislativa.
El domingo estarán convocados a las urnas 3,5 millones de costarricenses para escoger al presidente y los 57 diputados.
Según las encuestas, el expresidente (1994-1998) José María Figueres es el que más apoyo tiene, seguido por la exvicepresidenta (2002-2006) Lineth Saborío, el predicador evangélico y periodista Fabricio Alvarado, el abogado y diputado José María Villalta, y los economistas Rodrigo Chaves y Eliécer Feinzaig.