Policía que mató a tres personas con una patrulla busca la libertad sin haber cumplido ni un mes en prisión

El oficial de la Policía Marcio Antonio Rosales Maldonado que mató a tres integrantes de una misma familia por no respetar la luz roja de un semáforo, en Managua, pretende salir de prisión sin siquiera haber cumplido un mes en prisión.

El pasado 23 de mayo, Rosales Maldonado fue condenado a cuatro años y seis meses de cárcel tras ser encontrado responsable de la muerte de tres integrantes de una familia y de las lesiones sufridas por a otras dos en un accidente vial. No obstante, mediante su abogado defensor Luís Cáceres Morales busca revocar de manera total y plena la sentencia condenatoria dictada por la jueza del juzgado Segundo Local Penal de Managua, María Morales Alemán.

La petición la hizo el abogado mediante un recurso de apelación presentado el 13 de junio en el que alega que Rosales Maldonado no es el responsable del accidente “en vista que al momento de su conducción él lleva un régimen preferencial”. El abogado se refiere a que el hecho de conducir un vehículo oficial le daba la licencia de irrespetar la señal de tránsito que le marcaba realizar un alto.

El accidente que cobró la vida de Misael Doña Hernández (51 años), su hija Belkys Paola Doña Rosales (30) y hijo de ella Gamaliel Ezequiel Urbina Doña de tan solo 14 meses de nacido, ocurrió a eso de las 2 de la tarde del pasado 18 de marzo, en la intersección de los semáforos del Centro de Salud Edgar Lang, del capitalino barrio San Judas.

Según el expediente del caso, Rosales Maldonado conducía la patrulla policial con matrícula PN 676 con dirección de sur a norte y aunque el semáforo se encontraba con luz roja que le orientaba frenar la marcha, este desatendió la señal y terminó impactando con el vehículo que conducía el ciudadano José Augusto Gutiérrez, quien -según la acusación- tenía la preferencia.

Tras la colisión la patrulla embistió al ciclista Daniel Enrique Sandoval Salgado y a los integrantes de la familia Hernández, quienes permanecían a la espera de que el semáforo cambiara de luz para cruzar la calle.

Reyna Cristina Rosales Espinoza, esposa, madre y abuela de los fallecidos, logró sobrevivir al accidente.

JUEZ: EXCESO DE VELOCIDAD E IRRESPETO A LA SEÑAL DE TRÁNSITO

En la sentencia condenatoria, la judicial señaló que el oficial ocasionó el fatal accidente al conducir en exceso de velocidad y desatender la señal lumínica del semáforo.

Sin embargo, el abogado defensor alega que la judicial no las valoró de manera sana y lógica.

En el escrito, el defensor reconoce que en la resolución de la Dirección de Tránsito el oficial fue declarado como el responsable del accidente, pero insistee en que dicha resolución no se encontraba debidamente fundamentada ya que fue inobservado el régimen preferencial de circulación de vehículos que define la Ley 431.

Puntualmente alega que el oficial al momento del accidente tenía un régimen de circulación preferencial porque se encontraba en el ejercicio de sus funciones como miembro de la Policía, trasladando a unos detenidos. Incluso afirma que por eso se movilizaba con la sirena puesta.

Agrega que la prueba pericial también fue contradictoria con el resto presentadas en juicio y que según su criterio demuestran que su representado no tenía responsabilidad alguna en el accidente. Entre otras cosas, considera que la judicial violentó las normas de valoración de pruebas.

¿CONDENA DESPROPORCIONADA?

También mostró su desacuerdo con la condena de cuatro años que impuso la juez al oficial por el triple homicidio imprudente, en perjuicio de padre, hija y el bebé: la califica de "desproporcionada" al aplicar la pena máxima de este tipo penal.

Argumenta que la judicial no tenía elementos o causales que establecieran algún tipo de agravantes que motivara la imposición de la pena máxima y que más bien el oficial tenia causales suficientes a su favor a la hora de establecer la pena y menciono en este caso el no tener antecedentes penales.

“Queda claro que la judicial no valoró el presente caso de manera objetiva y en cambio la señora juez ha realizado una valoración de pruebas de manera subjetiva”, señaló en el recurso de apelación.

Al final, pide la revocación de manera total y plena de la sentencia condenatoria por existir duda razonable y que se programe la audiencia de apelación.