En Nicaragua nadie podrá filmar nada sin permiso de la dictadura: advierten alcances de la reforma a Ley de la Cinemateca

La dictadura aumenta su control sobre sus ciudadanos y atribuirá súper poderes a la Cinemateca, a cargo de la exnuera de Daniel Ortega y Rosario Murillo.

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  • septiembre 30, 2022
  • 12:16 AM

La iniciativa de reforma a la Ley de la Cinemateca Nacional que presentó la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo ante la Asamblea Nacional es considerada como una medida para silenciar, controlar y autocensurar a los cineastas, tanto nacionales como extranjeros, que quieran realizar una producción en Nicaragua.

Para los conocedores del tema, la iniciativa de reforma a la Ley de la Cinemateca, que ya fue remitida a la Comisión de Educación de la Asamblea Nacional para su análisis, atenta contra la libertad de creación y expresión y sienta un precedente nefasto en la región.

Las reformas crean una "super Cinemateca" que podrá instalar un sistema de control y censura para cualquier producción independiente, la cual incluye un registro de todas las personas naturales y extranjeras que pretendan realizar actividades audiovisuales en el país. Aunque este registro ya se venía haciendo, pero era para fines de realización de producción y no con el afán de control, como se establece en la iniciativa de reforma.

“¿Quién se va a atrever a producir algo en Nicaragua con una ley así? Nadie”, señala un experto en temas cinematográficos consultado por Despacho 505 y que pide omitir su nombre por temor a represalias.

CINEMATECA PODRÁ PRODUCIR MATERIAL AUDIOVISUAL

Uno de los puntos que genera preocupación es que la iniciativa plantea que la Cinemateca autorizará la preproducción, producción, realización o filmación, exhibición y distribución de proyectos audiovisuales y cinematográficos nacionales o extranjeros en Nicaragua.

“Eso lo que te está diciendo es que en Nicaragua es prohibido pensar, ni siquiera podés investigar un tema si te interesa eventualmente hacer una producción audiovisual que cuente una historia que tiene que ver con la realidad del país. La intención es generar miedo para que las personas se autocensuren”, cuestiona un productor audiovisual consultado por este medio.   

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Dentro de las nuevas atribuciones que tendrá la Cinemateca se encuentra que podrá producir, coproducir y realizar material audiovisual y cinematográfico “bajo estándares internacionales de calidad”. Según profesionales del sector, esta no es una competencia de la Cinemateca ya que no es una empresa productora.  

“Aquí hay dos cosas, uno es que ellos van a ser productores para hacer toda su propaganda y dos que tienen que autorizar la preproducción, producción, eso no existe en ningún lado del mundo. Aquí nadie va a poder filmar nada, pero absolutamente nada que no sea controlado por la Cinemateca, lo cual afecta la producción (cinematográfica) del país”, detalla "Marcelo", otro especialista consultado por Despacho 505, quien prefiere permanecer en el anonimato.

BORRA LA LEY DE CINEMATOGRAFÍA Y ARTES VISUALES

Pero, además, la iniciativa de reforma prácticamente anula la Ley 723, Ley de Cinematografía y de las Artes Visuales ya que suprime al menos 23 de los 49 artículos de dicha norma; deroga el capítulo dos referido a la creación del Consejo Nicaragüense de Cinematografía y las artes visuales; y el capítulo seis referido a la creación del fondo de fomento al cine nacional; y al menos seis artículos más de dicha ley.

“Están reformando la Ley de Cinematografía indirectamente porque están derogando cosas de la Ley para pasárselas a la Cinemateca. La Cinemateca su origen y su deber ser es proteger, preservar y conservar el patrimonio audiovisual, no tiene nada que ver con hacer producción”, insiste Marcelo.

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El Consejo Nicaragüense de la Cinematografía y las Artes Visuales tenía como función regular toda la actividad cinematográfica del país y estaba integrado por al menos 10 personas que incluía a instituciones del Estado como la Cinemateca, Instituto de Cultura, y representantes de organizaciones del gremio. Hasta donde se sabe este Consejo no funcionó ya que no se consiguió que Ortega lo nombrará.

La mayoría de funciones que tenía este Consejo están contenidas en las reformas a la Ley de la Cinemateca.

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