Nicaragua celebra a dos San Jerónimo: uno en las calles de León y otro preso en Masaya
20 Toros Huacos acompañaron la procesión en las calles de León, bailando al son de chicheros y licor, mientras que en Masaya policías armados evitaron que la imagen del santo "siquiera se asomara".


- September 30, 2022
- 11:58 AM
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Nicaragua celebró a dos San Jerónimo este viernes: uno libre en las calles de León y otro encerrado en su templo en Masaya por disposición de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, a través de su Policía Orteguista.
La Diócesis de León, dirigida por el obispo René Sándigo, ha sido criticada por callar la represión de la dictadura contra la iglesia Católica y la persecución contra sacerdotes y obispos. Sándigo, es al único obispo al que el régimen, le permite procesiones en las calles.
Y así quedó demostrado este jueves y viernes, que salieron en procesión con San Jerónimo. La presencia policial fue más de apoyo a los organizadores, mientras que en Masaya, los cordones policiales instalados intimidaron a los promesantes y evitaron que la imagen de San Jerónimo, su patrono, saliera del templo.
La acción policial en Masaya fue ejecutada bajo el supuesto de que las procesiones eran un peligro para la seguridad ciudadana, pero en León si fue permitida. La ironía es que es Masaya, la casa tradicional de San Jerónimo y sus fiestas, son parte de la historia de esa ciudad, considerada cuna del folclore nicaragüense.
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EN LEON, TODOS FELICES
Este viernes en León, unos 20 toros tradicionales de madera acompañados de sus respectivos sorteadores, bailaron alegremente al son de chicheros y tragos de licor como parte de la procesión de la imagen de San Jerónimo que recorrió las calles de esta ciudad.
La imagen del “San Jerónimo libre” salió desde la comunidad indígena de Sutiaba, hasta la catedral y este viernes hizo el recorrido de regreso. “Esta es una tradición del pueblo indígena que con el tiempo ha logrado arrastre en toda la feligresía católica en la ciudad universitaria”, dijo un tradicionalista.
Fue notable ver a policías en la procesión, pero de acuerdo a las imágenes mostradas en los medios del gobierno, ninguno agente se mostraba hostil y la mayoría, vestían uniformes de seguridad pública. Pero en Masaya, eran agentes de la Dirección de Operaciones Especiales, DOEP, y todos armados en actitud amenazante todo el tiempo.
Masaya es considerada una ciudad rebelde, con gente brava que durante la rebelión cívica de abril de 2018 mantuvo su resistencia hasta que Ortega ordenó atacarla con armamento pesado. La ciudad nunca se rindió y exigió la salida del dictador, como lo hizo en el pasado contra la dictadura de la familia Somoza.
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EN MASAYA: TEMPLO POR CARCEL “AL MÉDICO DIVINO”
Los masayas entendieron que una forma de desafiar al régimen era asistir a las actividades de su santo patrono. Y lo hicieron, abarrotaron el templo donde la dictadura confinó al que para ellos es el “médico que cura sin medicinas”.

Como no hubo procesión, los devotos asistieron fielmente a la eucaristía como parte de las actividades de este viernes. Durante la homilía, el Vicario foráneo de la ciudad de Masaya Bismark Conde, los felicitó por mantener firme la devoción al santo.
El párroco de la iglesia San Jerónimo, José Antonio Espinoza, recordó el duelo por el que pasa el Cardenal Leopoldo Brenes, por la pérdida de su mamá, doña Lilliam Solórzano, este jueves y envió solidaridad y cariño del pueblo cristiano de Masaya.
Al finalizar la misa, los devotos bailaron al son de las marimbas tradicionales de Masaya y gritaron vivas a su santo patrono, a la iglesia Católica y a sus sacerdotes que sufren la represión del dictador de El Carmen.

Aunque no hubo procesión, la alcaldía orteguista quiso congraciarse con los masayas al anunciar que aunque no fue un año como los anteriores debido al encierro del santo, el día seria asueto. “De todos modos aunque no lo hayan dado, los masayas lo tomamos. Viva Nicaragua libre, viva San Jerónimo”, gritó un promesante.