Corrupción en el CSE: adjudica las boletas electorales sin cumplir con la Ley de Contratación del Estado

Falta de transparencia, tráfico de influencia y corrupción en el CSE evidencia el proceso de adjudicación de las boletas electorales

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  • October 14, 2022
  • 03:31 AM

El Consejo Supremo Electoral (CSE), cometió una serie de “irregularidades” en el proceso de licitación de las boletas electorales, lo que refleja la falta de transparencia en la administración del erario público y propician actos de corrupción, señalaron expertos consultados por Despacho 505.

Uno de los señalamientos más crítico a las autoridades electorales es que ni siquiera publicaron el Programa Anual de Contrataciones (PAC), donde se debieron incluir la contratación del servicio de impresión de boletas y de las maletas electorales.

Este miércoles el árbitro electoral recibió las boletas que se utilizarán en las elecciones municipales donde se elegirán a 153 alcaldes y vicealcaldes de todo el país, pero no brindó detalles del número de boletas que imprimieron ni el monto de la contratación.

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El organismo de observación Urnas Abiertas explicó que el poder electoral no ha rendido cuentas sobre el costo de las boletas electorales desde el 2021 cuando adjudicaron a la misma empresa.

Urnas Abiertas explicó que conocieron de manera extraoficial que la adjudicación de contrato de impresión se otorgó mediante la figura de "contratación simplificada, un proceso usado bajo circunstancias especiales".

"El CSE debe reflejar el presupuesto asignado a la elaboración de boletas en su Plan Anual de Contrataciones y debe de ser publicado cada año según la Ley de Contrataciones Administrativas del Sector Público. Sin embargo, a 10 meses de 2022 el CSE siguen sin reportarlo", señaló el organismo de observación.

Un experto en temas de transparencia, consultado por Despacho 505, y que pidió omitir su nombre por temor a represalias, señaló que la asignación de la impresión de las boletas electorales probablemente se realizó mediante contrataciones direccionada, donde se le pide a un proveedor presentar una oferta, cuyo costo podría ser mayor que en el mercado.

“Seguramente estamos pagando un sobreprecio por las boletas electorales que debieran valer menos, pero como no hay un proceso competitivo, nos estamos yendo por un proveedor que nos dice prácticamente cuál es el precio y allí estamos pagando un sobreprecio que da lugar que en ese monto mayor que estamos pagando estamos financiando situaciones de corrupción”, expresó el experto.

TRÁFICO DE INFLUENCIA EN EL CSE

Esta práctica de contratación directa propicia otras irregularidades, como el tráfico de influencia, porque no se discrimina si el proveedor era el más idóneo, ya que se desconocen los parámetros que establecía el pliego de base y condiciones donde se debe especificar el tipo de servicios y características que se requerían.

“A todas luces esta situación de total opacidad, falta de transparencia dentro de las adquisiciones, da lugar a pensar que hay situaciones de corrupción dentro del sistema de contrataciones del Consejo Supremo Electoral”, concluye el experto. Agrega que el Poder Electoral violentó el principio de transparencia, eficiencia y competitividad.

La no publicación del PAC viola el artículo 20 de la Ley de contrataciones administrativas del sector público, ya que éste debe reflejar todas las adquisiciones que serán contratadas por el órgano electoral.

Este artículo señala que todos los organismo y entidades estatales deben “elaborar anualmente, el ´Programa Anual de Contrataciones´ (PAC) y publicarlo en el primer mes del período presupuestario utilizando el Clasificador básico del Sistema de Administración de Contrataciones del Sector Público”.

El experto señala que el hecho de que no se publique el PAC, ni los procedimientos de contrataciones no significa que el poder electoral no ha hecho compras, “sí las han realizado, pero están en total opacidad”.

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“Es como entrar en un cuarto completamente oscuro donde sabes que se están haciendo maniobras, operaciones, pero no se conocen cuáles son”, ejemplifica el experto.

La adquisición de la impresión de las boletas, según la Ley de contrataciones administrativas del sector público, tenía que ser por medio de una licitación, publicitada mediante una convocatoria donde se debía prevalecer criterios de tiempo, calidad y costos.

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