La devota diriambina que promueve tradicionales posadas en su barrio
Doña Agustina Bolaños lleva 25 años realizando las posadas en un barrio de Diriamba. Esta es su historia


- December 25, 2022
- 06:15 AM
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Hace 20 años, Agustina Bolaños decidió iniciar la realización de las posadas en el barrio San Francisco, en Diriamba, y desde entonces ha mantenido la tradición que empezó con el apoyo de su familia y con la que asegura ayuda a evangelizar en su comunidad.
"Yo siempre iba a las misas del Niño Dios en la madrugada y en la iglesia hacían y siguen haciendo las posadas. En Diriamba hay tres iglesias y en todas las hacen, pero iba poca gente de mi barrio, así que decidí hacerlas aquí", señaló la señora.
Sus hija saben tocar guitarras y decidieron acompañarla en esa iniciativa. "Al principio iban mis hijas, mis nietos que estaban pequeños y mis sobrinos. La gente del barrio me dijo que sí iban a recibirnos, porque cada día se va a una casa diferente y así empezamos", recordó la señora.
Le regalaron las imágenes
Asimismo, cuenta que no tenía las imágenes de los peregrinos, así que improvisaba, pero luego consiguió a alguien que se las prestaba, hasta que una noche, justo cuando iba a iniciar las posadas del año 2012, unas amistades llegaron a buscarla y para su sorpresa, le llevaron la imagen de la Virgen María junto a San José, que son los que peregrinan desde entonces en San Francisco.
"Esa noche sentí una emoción que no se imagina. Hasta lloré de emoción, me parecía mentira. Pregunté si eran prestados y me dijeron que era un regalo, porque sabían que yo hacía las posadas en el barrio", refiere la señora Bolaños.
La mujer recordó con nostalgia que el último día de novena, que es el 24 de diciembre, sacaba la procesión de "el pase" con los niños del barrio vestidos de José y María, también de ángeles y pastorcitos, pero desde la pandemia del coronavirus no lo ha hecho.
"Los niños iban vestidos y hacíamos el recorrido en el barrio, con chicheros y bien alegre. Repartía juguetes en mi casa, pero desde que vino el coronavirus lo descontinuamos. Si Dios me permite vida el próximo año vamos a retomarlo, ya con otros actores, porque los niños del inicio están todos casados, pero ahora nos acompañan con sus hijos", prosiguió.
Una forma de evangelizar
Ella considera que a través de esta tradición contribuye a evangelizar en su pequeña comunidad, pues todos los niños que acuden con sus padres se interesan por las cosas de la Iglesia.
"A los niños les da emoción ir a las posadas, cada día de la novena compartimos un mensaje sobre cómo Dios se hizo hombre a través de la Virgen María para salvarnos. A los niños les gusta ir con sus panderetas y chischiles, les gusta cantar y se integran muy bien con sus padres, además cada hogar que recibe a los peregrinos comparte con ellos un brindis", señala.