La postura del Cosep sobre el destierro de los presos políticos “es vergonzoso servilismo” 

Como “vergonzoso servilismo” y “falto de sensibilidad” fue calificada por dos opositores la postura del Consejo Superior de la Empresa Privada (Cosep), en relación al destierro de 222 presos políticos a quienes el régimen de Daniel Ortega también les arrebató la nacionalidad nicaragüense.

“Estos no merecen ser llamados Consejo Superior de la Empresa Privada”, dice Ana Quirós, miembros del Consejo Político del bloque opositor Unidad Nacional Azul y Blanco (UNAB).

“Queda claro”, añadió Quirós, que “eso no representa ni la voluntad, ni el interés de todo un pueblo, ni de una gremial. No es tampoco lo que hemos escuchado de quienes han salido de la cárcel”.   

Este lunes, el Cosep, la principal cúpula empresarial del país emitió un comunicado en el que “agradeció” al régimen de Daniel Ortega por la “liberación” de los 222 opositores a quienes evitó referirse como presos políticos.

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“¿Agradecer? ¿Agradecer qué? Ninguna de las personas que estaban en la cárcel había cometido delito alguno para agradecerle al dictador que los haya liberado, es gente inocente, nunca traicionaron a la patria, ejercían un derecho político que la dictadura criminalizó”, le agrega Luis Fley, de la opositora Fuerza Democrática Nicaragüenses (FDN).

“SERVILISMO VERGONSOZO”  

Entre los desterrados por el dictador se contaron siete miembros del Cosep que fueron también excarcelados y expatriados, incluso, los que antes ocupaban la presidencia de la cúpula empresarial: Michael Healy y Álvaro Vargas. Ambos fueron secuestrados, enjuiciados y condenados por delitos políticos.

Entre los presos políticos expulsados también se encuentra el empresario José Adán Aguerri Chamorro, quien dirigió el Cosep durante 13 años, en tiempos en que los empresarios y el régimen se beneficiaron mutuamente y que el dictador bautizó como “una alianza de consenso”.

“Ese comunicado es servilismo descarado de parte de este Cosep”, criticó Fley. “Uno lo lee y termina concluyendo que no fue redactado en las oficinas de esa organización, fue como redactado en El Carmen”, dice.

El Carmen es la vivienda en Managua del matrimonio dictatorial, que acondicionaron también como oficina de la presidencia desde donde despachan desde el 2007.

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“En vez de causar molestia, estos empresarios dan lástima, se nota a mucha distancia que están lejos de ser una cúpula empresarial seria, de respeto. Era mejor quedarse callados”, agregó Fley.

Un analista nicaragüense en el exilio, pidió recordar que la gremial enfrenta, como toda voz en Nicaragua, las restricciones de los derechos civiles. "Debemos reconocer lo difícil que es para cualquier persona u organización gremial o política expresar públicamente una opinión, en un país donde no existe libertad de expresión y asociación y ejercer esos derechos, puede costarte la cárcel o el destierro", advirtió.

Agregó también que no debe perderse de vista, los compromisos que ligan al actual Presidente en funciones de la gremial, Cesar Zamora, con el régimen dictatorial y que para nadie, es un secreto en el país.

INSENSIBILIDAD TOTAL

En el comunicado, los empresarios no llegan ni a mencionar una sola letra relacionada  a la violatoria anulación de la ciudadanía de los 222 opositores nacionales. “Esta claro que este Cosep es ocupado por gente del régimen”, dice Quirós.

Para la opositora el bloque empresarial hace uso de "una insensibilidad total" que ella califica de preocupante. “Esta gente ha sido despojada del derecho de volver a su país y eso duele. No reconocer que hay daño, es ser muy insensible y es lo que no leemos en este comunicado”, critica Quirós.

El analista por su lado, criticó que en el comunicado, no se mencione a las personas que aún continúan presas, "la persecución a la iglesia y la condena injusta de monseñor Álvarez, la supresión de los derechos y libertades ciudadanas, el total irrespeto a la Constitución y a las leyes", recalcó.

Descalificó el "agradecimiento" al régimen y en cuanto al de Estados Unidos, cree que debió extenderlo a la comunidad internacional que mantuvo siempre presión para las liberaciones. "La Comunidad Internacional ha contribuido y sigue contribuyendo a la solución pacífica de la crisis nicaragüense", recordó.

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Los opositores coincidieron en recordarles a los empresarios que hasta ahora, ningún preso político ha admitido culpa alguna que los haga renunciar en sus aspiraciones por recuperar sus derechos y la democracia para su país.

“Al contrario están motivados a seguir trabajando por la libertad y la democracia y nuestro compromiso es acompañarlos en esa lucha”, dijo Quirós.