Juez acusado de violar a una niña en Granada alega “disfunción eréctil”

La Fiscalía sostiene que Douglas Javier Malespín, quien fuera juez de Tola, Rivas, “se aprovechó de la inmadurez emocional, vulnerabilidad por edad e incapacidad para consentir” de la menor.

En el Juzgado de Distrito Especializado en Violencia de Granada, inició la mañana de este lunes, el juicio contra Douglas Javier Malespín Martínez, de 59 años, juez acusado de violar a una niña en Granada, quien alega “disfunción eréctil” y no haber estado en esa ciudad cuando se dieron los hechos.

Según la acusación, entre junio y julio de este año, Malespín, siendo titular del Juzgado Local Único de Tola, violó a la niña de iniciales T.G.O.A. y para evitar que la víctima resultara embarazada, le suministraba anticonceptivas.  

El juicio inició con la declaración de los testigos propuestos por la Fiscalía. La primera en brindar su declaración fue la mamá de la menor. La primera señal de alerta que descubrió fue que la niña ya no quería asistir a clases.  

En el juicio también declarararon cuatro maestras de la niña. Una de ellas reveló que a la menor la encontró llorando en los baños del colegio y ahí le reveló que estaba siendo víctima de violación por parte del juez.  

Tras las declaraciones de las maestras, el juicio se suspendió y la juez Ana Xóchitl Fonseca, titular del Juzgado de Distrito Especializado en Violencia de Granada, fijo la continuación del proceso para el próximo 28 de noviembre.  

SE APROVECHÓ DE EDAD, INMADUREZ Y VULNERABILIDAD DE LA NIÑA 

De acuerdo con la acusación, el hombre que impartía justicia en Tola, empezó a enamorar a su víctima desde el 2018, cuando ella tenía once años de edad y le expresaba “que estaba muy bonita que se cuidara, que estudiara, que la quería mucho”. Pero fue hasta que la menor cumplió 12 años que Malespín aceleró sus planes para interceptarla, engañarla y convencerla a que sostuviera relaciones sexuales con él, cuando ella asistía a clases de catequesis a la parroquia de Xalteva en Granada.  

Según la acusación, la primera vez que Malespín violó a la menor fue el 8 de junio del 2019 fecha en que llegó hasta la parte externa de la iglesia antes descrita y la llamó para decirle que se fueran a su oficina a “platicar”. 

Al llegar a la casa donde funcionaba su oficina, la obligó a sostener relaciones sexuales sobre una mesa que tenía en el área de la cocina. El imputado accedió a la menor “aprovechándose de su inmadurez emocional, vulnerabilidad por su edad, incapacidad para consentir”, dice textualmente la acusación y añade que, como la niña presentó sangrado en sus partes íntimas, Malespín le dijo que era normal porque era “señorita”, pero que no le dijera nada a su mamá porque si no lo echaban preso y luego le entregó la pastilla anticonceptiva.  

La segunda vez que violó a la menor fue a mediados del mismo mes y su método fue nuevamente interceptarla en el sector de la iglesia Xalteva para posteriormente trasladarla a su oficina y la tercera ocasión ocurrió a mediados de julio. Las circunstancias fueron las mismas.