La CPDH propone a los obispos Rolando Álvarez y Silvio Báez como candidatos al Nobel de la Paz 

La Comisión Permanente de Derechos Humanos propuso este martes a los obispos nicaragüenses Rolando Álvarez (encarcelado) y Silvio Báez (desterrado) como candidatos al Premio Nobel de la Paz por su labor en defensa de los derechos humanos. 

En una carta enviada al Comité del Premio Nobel para la Paz, Marcos Carmona, secretario ejecutivo de la CPDH destacó la labor de los obispos y reiteró su respaldo a una candidatura conjunta que “sería de gran trascendencia para el pueblo de Nicaragua.  

Según la organización, los obispos Silvio Báez y Rolando Álvarez “son el testimonio vivo de lo que el pueblo entero de Nicaragua ha sufrido bajo un régimen cuyas manos están manchadas de sangre y cuyo récord de derechos humanos deja mucho que desear”.  

Monseñor Rolando Álvarez, argumentan, ha estado en prisión por más de 11 meses acusado por delitos fabricados y sentenciado por jueces nombrados por el régimen mismo. Sin embargo, su entereza no ha mermado su vocación para levantar su voz con la que predica como siervo de los evangelios y como luchador pacífico de la causa de la justicia y la libertad.  

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Monseñor Silvio Báez, por su parte, ha destacado por su labor de denuncia de las injusticias del régimen desde cuando estaba dentro de Nicaragua y más aún después de su exilio forzado en abril de 2019. 

“Sus homilías cada domingo desde que estaba en Nicaragua han sido en defensa del verdadero espíritu de las enseñanzas de Dios y la defensa de los derechos humanos universales”, alegó la CPDH.

SOBRE EL PREMIO NOBEL DE LA PAZ 

Cada año desde 1901, el Comité Nobel Noruego otorga el Premio Nobel de la Paz a personas o/y organizaciones que han luchado por la paz, ya sea defendiendo los derechos humanos, promoviendo el desarme o resolviendo conflictos. 

La nominación de los obispos ha sido respaldada también por organizaciones opositoras al régimen de Daniel Ortega desde el exilio, miembros del Parlamento Europeo e intelectuales latinoamericanos.  

“Una nominación para el Premio Nobel de la Paz puede ser presentada por cualquier persona que cumpla con los criterios de nominación”, detalla el Comité del Nobel en su página web, donde señala que los nombres de los nominados no podrán ser revelados oficialmente hasta 50 años después. Esta restricción aplica también a nominados y quienes los nominan.