La Universidad Casimiro Sotelo cumple dos meses “jugando” con el futuro de los estudiantes
A dos meses de la toma y conficación de la UCA no hay señales del inicio de las clases en la improvisada Universidad Casimiro Sotelo
- October 15, 2023
- 11:44 PM
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Las autoridades de la improvisada Universidad Casimiro Sotelo no dan la cara. Desde hace cuatro semanas, cuando el rector Alejandro Genet anunció la segunda cancelación del inicio de las clases, esta vez por tiempo indefinido, "no han vuelto a dar señales", reprocha un estudiante que se había resignado a continuar sus estudios en la institución creada por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo para suplantar a la confiscada Universidad Centroamericana (UCA).
"Es una pérdida de tiempo y dinero", se lamenta el joven que esperaba concluir este año su formación profesional.
El segundo semestre correspondiente al año lectivo 2023 estaba previsto a comenzar el pasado 4 de septiembre, pero fue impedido por el asalto y confiscación de la universidad jesuita, la de mayor prestigio en el país. El operativo ejecutado el pasado 16 de agosto se selló con el anuncio inmediato de una nueva universidad, el nombramiento e instalación de sus autoridades, por parte del Consejo Nacional de Universidades; y el establecimiento de la fecha de arranque de clases.
No obstante, a dos meses de la toma y confiscación de la UCA, las autoridades designadas por el régimen para asumir las riendas de la universidad no han conseguido ponerla en marcha.
El primer llamado sin éxito lanzado por las autoridades orteguistas para iniciar las clases en la sede de la UCA fue el 28 de agosto. Entonces reprogramaron el arranque para el 25 de septiembre. Tampoco lo han podido cumplir.
LOS ESTUDIANTES PAGAN LAS CONSECUENCIAS
La peor parte se la llevan los estudiantes que afrontan el riesgo de perder el segundo semestre. "Un desastre", se queja el universitario que habla bajo condición de anonimato porque no tiene más remedio que terminar sus estudios ahí.
Aunque las autoridades de la Casimiro Sotelo no han informado sobre las razones del retraso, expertos consideran que está vinculado a dos factores: limitada capacidad de gestión de una universidad del nivel de la UCA y al rechazo de los estudiantes a continuar sus estudios en esta universidad.
El pasado 19 de septiembre, cuando Genet avisó que el inicio se posponía por tiempo indefinido, se limitó a decir que esto se debía a una revisión "exhaustiva de los expedientes académicos" para, supuestamente, identificar a los estudiantes de escasos recursos. Desde entonces, ni el CNU ni el rector han pronunciado.
Los estudiantes se quejan de que los han dejado en el limbo, pues además de que no les informan cuánto más deberán esperar, les han "secuestrado" sus expedientes universitarios.
Tras la toma de la UCA, la plataforma de dicha universidad fue desabilitada y quienes la usurpan no pusieron en marcha ningún sitio web o plataforma de información para que los estudiantes realicen consulta o trámites académicos.
FRACASO DE LAS NUEVAS AUTORIDADES
El catedrático Ernesto Medina considera que el frustrado inicio de clases se debe a que la dictadura no tenía ni idea de cómo gestionar una universidad del peso como la Universidad Centroamericana (UCA).
En una entrevista concedida a DESPACHO 505, Medina dijo que ese retraso es una clara evidencia de un fracaso y que era una bofetada para el régimen que se atrevió a poner a mano encima de una institución de alto prestigio como la UCA sin tener idea de cómo gestionarla. Lo grave, añadió, es el claro riesgo de que terminen llevando a la ruina todo el capital que tomaron por la fuerza.
"Para ellos sería un fracaso abrir las clases y tener mil o dos estudiantes, pues ya con eso sería una bofetada. Les quedó grande la UCA", dijo Medina.
El régimen Ortega-Murillo bloqueó la posibilidad de que los universitarios continuaran sus estudios en otras universidades en Nicaragua, al prohibir a la Universidad Americana (UAM) que aceptara al menos 640 matrículas. Incluso, se negó a entregar los certificados de notas para obligarlos a continuar en la Casimiro Sotelo.
ESTUDIANTES BUSCAN OPCIONES DE ESTUDIO
Tras el cierre y confiscación de la UCA, las universidades jesuitas de El Salvador y Guatemala recibieron más de 3.000 peticiones de estudiantes para poder continuar sus estudios. No obstante, esa posibilidad solo se puede concretar si los estudiantes se trasladan a estos países.
DESPACHO 505 conoció que en la segunda quincena de octubre las universidades enviarán a todas las personas que completaron el formulario de continuación de estudios la oferta académica de la Universidad Rafael Landívar de Guatemala y de la Universidad José Simeón Cañas (UCA) de El Salvador.
También informarían sobre las modalidades de estudio, los documentos a presentar y los pasos del procesos de admisión.