Ortega se burla de los apátridas en el acto del 90 aniversario de la muerte de Sandino
Entre risas, el dictador Ortega aprovechó su discurso para decir que los nicaragüenses expulsados de su país, "ahora son yanquis, ahora son españoles, y hablan así, como ellos".


- February 21, 2024
- 12:39 PM
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El dictador Daniel Ortega reapareció en público la noche de este miércoles en el acto del 90 aniversario de la muerte del general Augusto C. Sandino, en Managua. Llevaba 56 días aislado y aprovechó el evento para burlarse de los 222 nicaragüenses que su régimen desterró, desnacionalizó y confiscó en febrero del 2023.
Entre risas, Ortega dijo que los opositores nicaragüenses expulsados a Estados Unidos "ahora son yanquis. Se deben de sentir muy contentos de ser yanquis. Otros están en España y se sienten españoles, muy contentos de ser españoles. Ya deben hablar como los españoles".
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El dictador, de 78 años y en el poder desde 2007, comenzó su discurso criticando a los políticos nicaragüenses que negociaron con Estados Unidos entregar las armas en 1927 a cambio de garantizar unas elecciones libres, y los comparó con los 222 presos políticos que fueron expulsados a Washington el 9 de febrero de 2023 y a los que, luego, despojó de la nacionalidad.
"Son los mismos traidores, vendepatrias, apátridas", dijo Ortega.
Ortega defendió que "el que traiciona a su patria, deja de ser de ese país, deja de tener patria, y por eso se llaman apátridas".
Incluso, expresó que tanto los expresidentes Adolfo Díaz y Emiliano Chamorro, ambos gobernantes durante el periodo de Sandino, al que llamó "padre de la lucha antiimperialista desde Nicaragua", debieron ser desnacionalizados por ser "traidores a la patria".
LA OPERACIÓN DEL DESTIERRO Y DESNACIONALIZACIÓN
La operación de destierro y de desnacionalización de los 222 presos políticos fue ejecutada en tan solo horas. Los opositores fueron sacados de las cárceles en la madrugada del 9 de febrero de 2023 y enviados en un avión con destino a Washington.
Esa misma mañana, la Asamblea Nacional controlada por orteguismo, reformó el artículo 21 de la Constitución Política y convirtió en ley el destierro y la desnacionalización de los 222 nicaragüenses. El nuevo mecanismo de represión días después lo aplicó contra otro grupo de 94 ciudadanos.
Ortega compareció después de 56 días de ausencia de la función pública, rodeado de los mandos policiales, del Ejército, del Poder Electoral y la Asamblea Nacional, las instituciones que ha usado para reprimir y usurpar el poder en Nicaragua desde 2018. El dictador no se dejaba ver en un evento oficial desde el 27 de diciembre de 2023 en un acto del resucitado Ministerio del Interior.
Junto a Ortega anoche estuvieron Julio César Avilés, Jefe del Ejército; Francisco Díaz, Director de la Policía; Gustavo Porras, presidente de la Asamblea Nacional; Lumberto Campbell, magistrado del Consejo Supremo Electoral; la diputada Loria Raquel Dixon; Bayardo Rodríguez, Jefe del Estado Mayor General del Ejército; Marvin Elías Corrales, Inspector General del Ejército de Nicaragua; comisionado, Horacio Rocha, Ministro y Asesor del presidente para temas de seguridad; Zhucov Serrano, subdirector general de la Policía, y Luis Caña Novoa, Viceministro del Interior.
DISCURSO DE ODIO
El dictador nicaragüense dedicó gran parte de su intervención a leer el Manifiesto del General Sandino y hasta volvió a prometer la construcción del canal interoceánico, concesión que entregó en el 2014 al empresario chino Wang Jing, pero que nunca se ejecutó.
No obstante, en mensaje central que ha dejado es que toda expresión de discenso es suficiente para que un ciudadano sea considerado traidor a la patria, lo que conlleva destierro, apatridia y confiscación.
Ortega, como es habitual, no dejó por fuera los ataques a Estados Unidos, país al que acusó de invasores, después de leer fragmento del poema Oda a Roosevelt de Rubén Darío.
"Los imperialistas de la tierra no han desaparecido, mas bien están cometiendo crímenes horrendos, a vista y paciencia de los países europeos (...) cómplices", dijo Ortega.