Estadounidense es declarado culpable de femicidio, tenía boleto de avión para salir del país

En el último día del juicio el director del penal de Granada declaró que McCartney tenía boleto comprado para viajar a Miami el 27 de junio. La juez lo había favorecido con una orden de expulsión, pero sin revocarla dio curso al juicio.

El estadounidense Larry Robert McCartney, de 68 años, fue declarado culpable de femicidio y asesinato. En su poder quedó un boleto de avión con destino a Miami para el 27 de junio, que era parte de su plan para no pagar por asesinar a dos mujeres en Granada: su esposa Guadalupe del Carmen García, de 22 años; y Martha López Centeno, de 20.

McCartney el 19 de mayo tuvo a su favor una orden de expulsión del país sin ser juzgado, la cual fue solicitada por la fiscal Gabriela Espinoza Carranza y consentida por la jueza Ana Xóchitl Fonseca. Sin explicaciones, un mes después de ordenar la expulsión, Fonseca dio curso al juicio y este lunes dictó el fallo de culpabilidad que lo declara femicida y asesino. Esto porque, por ley, en Nicaragua solo se tipifica como femicidio cuando existe una relación de pareja entre la víctima y el asesino. Una diferencia de 15 años de castigo en prisión -pena mínima por asesinato- favorece a los asesinos de mujeres que no tienen ese vínculo, algo que es cuestionado por las defensoras de mujeres.

A McCartney, la jueza de Distrito Especializado en Violencia de Granada Ana Xóchilt Fonseca le dictará sentencia el próximo 3 de julio. La Fiscalía y el acusador adherido Michelle Antonio Cordonero solicitaron que lo sancionen con 30 años de prisión por cada crimen cometido, más un año por portación ilegal de armas. Las penas totalizan 61 años de encierro; Sin embargo, el máximo tiempo en prisión establecido en el Código Penal nicaragüense, aunque los delitos que cometió suman 61 años de encierro.

CON BOLETO COMPRADO PARA LA IMPUNIDAD

En el último día del juicio se conoció que McCartney tenía planificado salir del país con destino a Miami. “Esta información la brindó el director del Sistema penitenciario de Granada, quien declaró en el juicio que el acusado tenía listo su boleto de avión para salir rumbo a Miami el 27 de junio”, informó el abogado Michelle Antonio Cordonero, quien durante el proceso representó a la señora Jeovania Auxiliadora Centeno, mamá de Guadalupe del Carmen García.

El juicio inició el pasado 24 de junio y concluyó este lunes 29 a las 4:37 de la tarde con la resolución de culpabilidad. “En ese momento Larry Robert McCartney sonreía, mientras movía su cabeza a ambos lados”, relató Cordonero.

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De acuerdo con el acusador particular, en el proceso fueron llamados 24 testigos y se aportaron evidencias suficientes para demostrar que McCartney planificó y ejecutó el asesinato dos las dos mujeres.

“En el juicio se demostró con un informe pericial biológico que McCartney tenía manchas de sangre en sus manos que pertenecían a sus víctimas, que había estado con ellas antes de asesinarlas. Otro informe balístico confirmó que el revólver calibre 38 que se usó en la escena del crimen pertenecía al acusado y que sus huellas habían quedado impregnadas al momento de realizar los disparos”, detalló Cordonero.

LAS CITÓ PARA MATARLAS

Según la acusación que presentó la Fiscalía, el estadounidense Larry Robert McCartneyMcCartney planificó el doble asesinato. El día 2 de marzo del 2020 llamó por teléfono a su esposa para decirle que quería encontrarse con ella y su amiga Martha López Centeno, “con el fin de privarles la vida a ambas”.

McCartney recogió a las dos mujeres en el vehículo placas M 246-032, estuvieron en un restaurante ubicado en la comarca Las Playitas del Puerto Asese durante unos 50 minutos y, luego, las condujo en su vehículo hacia la comunidad de Posintepe, donde las asesinaría.

A eso de las 4:45 de la tarde del 2 de marzo, con un arma calibre 38, al llegar a la Quinta Bolero, en Posintepe, el estadounidense detuvo la marcha del vehículo y comenzó ejecutar su plan: Bajó del vehículo y primero sacó de manera violenta a Martha López Centeno. Le disparó en la cabeza y lanzó su cuerpo a un precipicio.

Luego hizo lo mismo con su esposa, ella solo se cubrió el rostro con su mano izquierda en un intento por protegerse de las balas. Antes de huir del lugar, McCartney se acercó a los cuerpos de ambas mujeres y les disparó.