Ortega apunta a la Luna, el espacio y los cuerpos celestes por medio de una nueva ley

Una vez más Nicaragua, el segundo país más pobre de América Latina, aspira llegar al espacio extraterrestre. A más de ocho años de que Laureano Ortega anunció la compra de un satélite a China, llamado Nicasat-1, y que nunca se puso en órbita, la dictadura de Daniel Ortega mandó a la Asamblea Nacional el proyecto de Ley de Creación de la Secretaría Nacional para Asuntos del Espacio Ultraterrestre, la Luna y Otros Cuerpos Celeste.

La dictadura argumenta que esta ley permitiría al Estado nicaragüense “atender esta temática con la rigurosidad técnica y científica necesaria con visión de defensa de intereses supremos nacionales y la búsqueda de oportunidades que como país debemos de aspirar en ese ámbito, de conformidad con las normas de derecho internacional”. En la exposición de motivos, se desempolva un tratado firmado por Nicaragua en Washington, en 1967.

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El documento, que tomó por sorpresa a algunos diputados del Partido Liberal Constitucionalista, señala que la creación de esta secretaría es de gran trascendencia para integrar a Nicaragua en los diferentes foros internacionales, en los que se aborda esta temática que “es de gran relevancia para nuestro país y la humanidad”. Una vez aprobado este proyecto de ley, dice,  se presentará ante la Oficina de Asuntos del Espacio Ultraterrestre de la Secretaría de las Naciones Unidas “como parte del cumplimiento a los compromisos de Nicaragua en esta materia”. 

CREAN CARGO 

El artículo 2 de la iniciativa de Ley crea la Secretaría Nacional para Asuntos del Espacio Ultraterrestre, la Luna y otros Cuerpos Celestes, como una entidad descentralizada, adscrita a la Presidencia de la República, con autonomía técnica y administrativa, patrimonio propio y personalidad jurídica. Además, será coordinada por un Secretario, que será nombrado por el Presidente de la República y responderá por el seguimiento de los compromisos internacionales del Estado Nicaragua.

El mantenimiento de esta cartera pasará al Presupuesto General de la República, pues se establece que tendrá patrimonio propio compuesto por el presupuesto asignado por la Presidencia de la República, así como de fondo, bienes muebles e inmuebles que pueda recibir de países amigos, organismos internacionales o la Oficina de Asuntos del Espacio Ultraterrestre de la Secretaría de las Naciones Unidas y entidades análogas.

El artículo cuatro de la iniciativa de Ley enumera las funciones de la Secretaría entre las que se encuentran formular, proponer y ejecutar las líneas generales de la política en asuntos del espacio ultraterrestre, la Luna y otros cuerpos celestes, a través de las instituciones competentes en la materia; promover el efectivo desarrollo de las actividades Espaciales para ampliar las capacidades del país, en las ramas educativas, industrial, científica y tecnológica en esta materia.

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Además, desarrollar la capacidad científica-tecnológica del país a través de la articulación de los sectores involucrados en todos los campos de la actividad espacial, promover el desarrollo de los sistemas espaciales y los medios, tecnología e infraestructura necesarios para la consolidación y autonomía de este sector en Nicaragua, e impulsar una activa cooperación internacional mediante acuerdos que beneficien las actividades espaciales y que permitan la integración activa de Nicaragua a la Comunidad Espacial Internacional.

En septiembre de 2012, el Instituto Nicaragüense de Telecomunicaciones y Correos (Telcor) anunció la compra de un satélite a China, llamado Nicasat-1, para mejorar las telecomunicaciones del país y ofrecer servicios a otras naciones, en vista que tendría cobertura desde México hasta Colombia. El satélite estaría en órbita en el último trimestre del 2015, según anunció Laureano Ortega el día que presentó el modelo miniatura del proyecto, en compañía de los supuestos inversionistas chinos que fabricarían el vehículo espacial. La Unión Internacional de Telecomunicaciones (UIT), organismo especializado en telecomunicaciones de la ONU, le otorgó licencia en 2017. De acuerdo con ese organismo Nicaragua inscribió el satélite el 13 de junio del 2016 y la licencia fue otorgada el 5 de julio del 2016.