La emprendedora que se abre camino en el mercado de las mascotas en Nicaragua
Desde los quince años, Eveling Velázquez descubrió su interés por aprender a cuidar mascotas. Y hoy lo ha convertido en su medio de subsistencia.
- May 17, 2021
- 06:16 AM
- Despacho 505
- Copyright Despacho 505
Para Eveling Velázquez Sánchez, su día laboral comienza desde las seis de la mañana. Su primera visita de hoy, es para bañar y peinar a Picky. Su especialidad es el embellecimiento canino, que, según dice, involucra el bienestar animal.
Desde los quince años, Eveling descubrió su interés por aprender a cuidar mascotas. Y hoy lo ha convertido en su medio de subsistencia. “Empecé ayudando en una veterinaria, mirando y me gustaba. Era proactiva. A veces me regañaban porque dejaba a los peritos mal bañados. Mi primera tutora fue mi hermana y luego saqué un curso con una costarricense”.
Hoy, su clienta Picky, se ha portado muy bien, comenta. Le han hecho un servicio completo de coloración de pelo, con tintes libres de amoniaco y gentil para su pelo. También la bañaron, le cortaron las uñas y le cepillaron sus dientes. “Hay caninos malcriados e hiperactivos. Los tengo que agarrar fuerte, como un niño. Yo llego a una casa a lidiar con un niño prácticamente. La mayoría se dejan tocar, excepto con los clientes nuevos, porque se inquietan. Tengo que usar bozal para protegerme. Yo camino con un ayudante, Janet me ayuda, los sostiene y yo voy cortando el pelo”, señala.
MÁS HISTORIAS: Productos naturales, la clave del éxito de dos emprendedoras
En sus experiencias, recuerda varias mordidas de perros, pero ella justifica la reacción de las mascotas, sobre todo, los de raza y tamaño pequeño, que según Eveling, son los más malcriados. “Por ejemplo cuando los aprieto muy fuerte sin querer, me quieren morder porque es una manera de defenderse. Nunca les gusta el baño, lloran. Brincan, se orinan, todos son diferentes. Por eso los comparo con los niños”.
Emprender, dice, no ha sido tarea fácil. Eveling cuenta que cuando puso su renuncia a su trabajo anterior, ocupó su liquidación, para comprar instrumentos de trabajo.
Al principio, conseguía pocos clientes. Uno o dos peros a la semana. Pero reconoce que este negocio funciona con recomendaciones y referencias de sus clientes. Comenzó viajando en bus, cargando dos bolsos con sus instrumentos de trabajo. Luego pudo
comprar una moto y ahora, ha superado esa barrera y se moviliza en su auto. “Mi método es que trabajo a domicilio, con citas previas. Tengo una agenda. Yo llamo a mis clientes y llevo un control de las citas. Soy muy puntual”, explica.
La pandemia de coronavirus fue un reto para Eveling, porque tuvo que reducir sus visitas y el el horario de trabajo se acortó a medio día. Ahora ha retomado su rutina y se cuida mucho, ya que sus dos hijas le esperan en casa. Mientras trabaja, usa mascarillas y se lava las manos con alcohol constantemente.
“Yo no tengo una página web. Mis clientes son mi mejor recomendación. El último cliente lo atiendo a las cuatro y media de la tarde. Todo el día de pie. Es súper agotador. Nosotros cargamos con el almuerzo, porque no nos da tiempo de ir a comer a casa. Se hace cortito el día y nos turnamos para comer y no atrasarnos”, dice.
“Antes, como 4 años atrás, era difícil encontrar los productos como champú, instrumentos, y cepillos. Ahora, hay varias empresas que distribuyen máquinas, cuchillas, desinfectantes y productos para embellecer a los perros. Todo se consigue en Nicaragua, porque ahora, el cuidado de las mascotas se ha hecho bastante popular”.
Eveling dice que no solo atiende perros de raza. En su agenda también incluye a perritos criollos. “Tengo bastantes clientes con perros criollos. Yo incentivo a los dueños y les ayudo con consejos. Yo misma voy acostumbrando al cliente que rasure a su perro, con frecuencia. No puede tener un perrito dentro de la casa sin bañar, cortarle las uñas y depilar”, recomienda.
En Managua hay escuelas que entrenan y ofrecen cursos de embellecimiento animal. Eveling como emprendedora sugiere a quieren iniciar un negocio que se capaciten constantemente. “La persona que desee trabajar en este negocio, primero debe descubrir en primer lugar, si tiene paciencia y amor para ejercer este oficio”, expresa.
Este artículo forma parte de la serie de microhistorias sobre emprendedores nicaragüenses.