Dictadura acusa de "conspiración" a Noel Vidaurre, María Oviedo y Pedro Mena

La dictadura de Daniel Ortega a través del Ministerio Público acusó este jueves al aspirante presidencial Noel Vidaurre, la defensora de derechos humanos María Oviedo y el líder campesino Pedro Mena, de supuesta "conspiración para cometer menoscabo a la integridad nacional".

La acusación fue presentada ayer miércoles y este jueves se realizaron las audiencias preliminares, informó la Fiscalía en un comunicado.

El juez de la causa, cuya identidad no fue revelada, admitió las acusaciones y decretó la medida cautelar de prisión preventiva para los presos políticos.

Noel Vidaurre permanece bajo arresto domiciliar desde el pasado 24 de julio luego de acudir a una cita al Ministerio Público. El veterano político conservador es el séptimo aspirante a la Presidencia que es acusado, antes fueron señalados por el Ministerio Público, Cristiana Chamorro, Arturo Cruz, Félix Maradiaga, Juan Sebastián Chamorro, Miguel Mora y Medardo Mairena.

La abogada María Oviedo de la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), fue detenida el pasado 29 de julio en la ciudad de León, cuando se encontraba en la casa de su mamá. Posteriormente, fue trasladada a las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como El Chipote. Mientras que Pedro Mena fue detenido el 5 de julio.

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Desde el mes de mayo la dictadura ha encarcelado a unos 36 destacados opositores, de los cuales 32 ya fueron acusados. Los que no han sido acusados son Juan Lorenzo Holmann, Roger Reyes, Alex Hernández y Yader Parajón. De los 32 acusados al menos 20 ya fueron remitidos a juicio.

Esta ola de detenciones que puso en marcha la dictadura de Ortega se da en el marco del proceso electoral, donde al menos 7 de los 36 dirigentes encarcelados habían mostrado su intenciones de aspirar a la Presidencia de la República.

ORTEGA DICE QUE SE JUZGA A “TERRORISTAS”

El pasado lunes, el dictador Daniel Ortega calificó de “terroristas” a los opositores que se encuentran detenidos por supuesta traición a la patria, y “demonios de sotanas” y “satánicos” a los obispos y sacerdotes nicaragüenses críticos.

Según Ortega, sus adversarios “se estaban preparando para repetir la historia (de abril de 2018) y se está haciendo justicia, eso es todo, se está haciendo justicia contra los terroristas”.

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Ortega se refería a las protestas ciudadanas en su contra iniciadas en abril de 2018 por unas controvertidas reformas a la seguridad social y que luego se convirtieron en una exigencia de su renuncia debido a que respondió con represión.

Según el sandinista, cuando estallaron las manifestaciones en abril de 2018 colapsó el sistema de salud y responsabilizó a “los terroristas de saco y corbata que mandaban y les pagaban a los pandilleros para que cometieran tropelías y crímenes”.