Policía orteguista hace visita intimidatoria a sacerdote de Ciudad Darío que llamó a no votar

El párroco de la Iglesia San Pedro Apóstol de Ciudad Darío, Vicente Martínez, denunció este miércoles ser víctima de intimidación policial en represalia por tildar el proceso electoral como un “circo” y recomendar a la población no salir a votar el próximo 7 de noviembre.

Según el religioso, agentes de policía le hicieron una “visita de cortesía” que él asume como una forma de amedrentarlo.

En su actividad religiosa matutina, el sacerdote denunció ante sus feligreses desde el púlpito que después de haber dicho en la homilía del domingo pasado “que las elecciones son un circo, que son una falsedad”.

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De acuerdo con la versión del religioso, publicada en un vídeo a través de la página oficial de Facebook de su parroquia, al templo llegó un comisionado de Matagalpa y el jefe policial de Ciudad Darío, cuya identidad no precisa, a bordo de una camioneta particular para no llamar la atención. Le dijeron que solo andaban en una visita de cortesía.

“Ustedes saben que esas visitas de cortesía son peligrosas, pero recuerden hermanos que yo no voy a callar las injusticias, las corrupciones yo no las voy a callar. Ya sabemos que este circo electoral es una realidad, que nadie lo va a aprobar y ellos andan buscando que la Iglesia lo apruebe”, dijo el sacerdote poniendo en claro que la visita de los jefes policiales tenía la intención de atemorizar y obligarlo al silencio.

“Dijeron que andan visitando a todos los párrocos, a todos los sacerdotes de Diócesis y yo he preguntado a otros sacerdotes y me han dicho que no. La visita fue directamente a mi persona”, agregó.

El presbítero pidió a los fieles católicos sus oraciones porque, les recordó, “yo me muevo por las comunidades, ando evangelizando, ando en visitas pastorales”, evidenciado que su seguridad e integridad física podrían estar en peligro.

REITERA QUE ELECCIONES SON UNA FARSA

Pese a la visita policial que el cura asume como una intimidación, aseguró que no va a callar y que seguirá denunciando las injusticias, al tiempo que reiteró su llamado a no salir a votar.

“Recuerden, las elecciones son una farsa, así que ningún nicaragüense, ningún católico, ningún patriota verdadero, va a aprobarlas porque ya sabemos cuáles son los resultados”, insistió, para luego advertir que las intimidaciones siempre se dan “pero la voz de la Iglesia, la voz de los profetas, la voz de los cristianos nunca la van a callar. Siempre tenemos que denunciar el mal, le duela a quien le duela”.

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“Como católicos y como iglesia, si nos quedamos callados estaríamos siendo cómplices de la corrupción y las mentiras de los políticos de Nicaragua, solo pido sus oraciones por mi persona para seguir adelante”, finalizó el padre Martínez.

Varios sacerdotes católicos se han convertido en voces críticas contra la represión y violaciones a los derechos humanos de los nicaragüenses ejercida por el Gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo. La vocera gubernmental ha emprendido desde el 2018, una dura arremetida contra los líderes religiosos a quienes ha llegado a tildar de complices del terrorismo, golpistas y hasta promotores del mal.