Nicaragua es el primer país de Centroamérica que se queda sin organismos de DD.HH.

La  Asamblea Nacional, controlada por Daniel Ortega y Rosario Murillo, asestó una nueva “estocada” a 25 organizaciones sin fines de lucro y despojará de su personería jurídica a la Comisión Permanente de Derechos Humanos (CPDH), la última trinchera legal que quedaba en el país para documentar las denuncias de abusos de autoridad.

Ortega primero ordenó la ilegalización del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), después canceló la personería jurídica de la Asociación Nicaragüense Pro-Derechos Humanos (ANPDH).

Vilma Núñez, presidenta del Cenidh, señaló que Nicaragua está marcando “récords negativos mundiales”, ya que se quedará sin organismos de derechos humanos legalmente constituidos.

La presidenta del Cenidh agregó que Ortega que “no tiene el más mínimo respeto por los derechos humanos” de los nicaragüenses, y lo demuestra al clausurar a los organismos que realizan un trabajo en beneficio de los nicaragüenses.

LEA TAMBIÉN: CPDH: Ortega no quiere a organismos de derechos humanos documentando los abusos que comente

“Son unos inútiles, están creyendo que con cerrar organizaciones de derechos humanos van a dejar de oír las denuncias de las barbaridades que cometen, se equivocan”, declaró la defensora de derechos humanos.

PRIMER PAÍS EN CENTROAMÉRICA SIN ORGANISMOS DE DD.HH.

La doctora Vilma Núñez manifestó que, a pesar de la ilegalización de las organizaciones, los defensores de derechos humanos en el país, “se han multiplicado” y están dedicados a recopilar información que documente las violaciones de los derechos de los nicaragüenses.  

Lamentó que Nicaragua sea el primer país en Centroamérica que extermina a los organismos de derechos humanos independientes.

“¿Cuál es la tipificación que se puede hacer del Estado? Un Estado totalitario, autoritario, terrorista, falto de democracia”, apunta la presidenta del Cenidh, quien agregó que la inminente cancelación de la personería jurídica de la CPDH será denunciada ante los organismos internacionales.

ORTEGA QUIERE UNA SOCIEDAD CON LA CABEZA GACHA

Gonzalo Carrión, miembro del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca Más, que funciona desde el exilio, dijo que la petición de cancelar la personería jurídica a la CPDH muestra a un Ortega que quiere a una sociedad controlada y sometida.

“Ellos quieren tener un país en la desolación, (con) una sociedad uniformada, completamente gris, silenciada y con la cabeza gacha como sinónimo de sometimiento”, explicó Carrión.  

Álvaro Leiva, directivo de la Asociación Nicaragüense Pro Derechos Humanos, ANPDH, señaló que Ortega quiere evitar ser auditado, por esa razón decidió ilegalizar a los organismos de derechos humanos en Nicaragua.

LEA TAMBIÉN: La dictadura niega el ingreso a Nicaragua al músico Carlos Luis Mejía

“Hoy por hoy, lo que miramos es un Daniel Ortega y un régimen que ha venido teniendo una conducta de hostilidad hacia los derechos humanos, hacia los derechos constitucionales, ejerciendo más represión, asedio, encarcelamiento y más violaciones a los derechos humanos”, apuntó Leiva.

PDDH DIRIGIDA POR LA JUVENTUD SANDINISTA

En Nicaragua solo queda la estatal Procuraduría de Defensa de los Derechos Humanos (PDDH), una institución controlada por Ortega y Murillo, y que es dirigida por Darling Ríos, miembro activa de la Juventud Sandinista.

“La tragedia de Nicaragua es que ni siquiera tiene organismos no solo independientes, porque la tal Procuraduría de Derechos Humanos aparte de que es una organización parcializada y entregada a los dictados de la dictadura está complemente descalificada en el ranking que establece para reconocer la credibilidad o no de estas organizaciones Naciones Unidas”, apuntó Núñez.

Carrión señaló que la PDDH es una institución “devaluada” donde se malgasta los impuestos de los nicaragüenses.

“Es una pantomima y solo procura quedar bien con la familia Ortega- Murillo”, manifestó el también abogado del Colectivo.