Dictadura libera a los productores musicales Salvador Espinoza y Xóchilt Tapia y salen de Nicaragua

Los productores Salvador Espinoza y Xóchilt Tapia fueron liberados este jueves por el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo luego de permanecer por más de 10 días detenidos en las celdas de la Dirección de Auxilio Judicial (DAJ), conocida como El nuevo Chipote.

DESPACHO 505 conoció que tras ser liberados, ambos productores salieron de Nicaragua.

Espinoza y Tapia, dueños de SaXo Producciones, fueron detenidos la tarde del pasado 12 de abril cuando se encontraban en su casa ubicada en el Reparto San Antonio en Managua. Ni el Ministerio Público ni la Policía informaron sobre las razones del allanamiento de la vivienda y la detención de ambos.

Ese mismo día fueron apresados el vocalista de la banda Monroy y Surmenage, Josué Monroy, así como Leonardo Canales, director de La Antesala. En esa semana se conoció además la expulsión del país de la artista italiana Emilia Arentti.

Leonardo Canales fue deportado "a su país de origen", confirmó el espacio cultural La Antesala y además anunció el cierre definitivo del local.

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"Desde La Antesala informamos que nuestro director y colega Leonardo Canales ha sido deportado a su país de origen y ha llegado bien. Agradecemos las muestras de apoyo y cariño brindadas. Anunciamos formalmente que damos cierre a nuestro espacio cultural y agradecemos a los artistas y público que nos acompañaron durante este recorrido", informó La Antesala en su página de Facebook.

MONROY HABRÍA SIDO DEPORTADO A EL SALVADOR

Versiones extraoficiales indicaron que en el caso de Josué Monroy este habría sido deportado a El Salvador, ya que también tiene la ciudadanía de ese país.

Un abogado explicó a Despacho 505 que los tres artistas estaban bajo detención ilegal y arbitraria, ya que la Constitución Política establece que nadie puede ser detenido sin una orden judicial a menos que los encuentren cometiendo un delito.

Además indicó que toda persona detenida debe ser puesta bajo la orden de un juez 48 horas después de su detención, las cuales cuentan desde el momento de su arresto. Tampoco se conoció si fueron puestos bajo las órdenes de un juez de audiencia especial de garantías constitucionales, donde se puede ampliar el plazo de detención hasta por un plazo de 90 días.