La cacería de feligreses católicos en Nicaragua aumenta a 78 la cantidad de presos políticos

La cantidad de presos políticos en Nicaragua aumentó de 64 a 78 en el mes de julio. Según un informe del Mecanismo para el Reconocimiento de Personas Presas Políticas, las nuevas detenciones por motivos políticos revelan una cacería de feligreses católicos en el país.

En las cárceles de Nicaragua hay “78 personas reconocidas como presas políticas a la fecha: 12 mujeres y 66 hombres”, detalla el Mecanismo, cuyos informes son avalados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH). 

La cifra de detenciones atribuidas a la dictadura de Daniel Ortega es un 21% superior en comparación al mes anterior. En total son 14 los nuevos ciudadanos encarcelados y clasificadas como prisioneros políticos entre los que se encuentran diez 10 feligreses y un sacerdote católico.  

“Continúa el patrón represivo para la criminalización de la libertad de culto. Se registró la captura de un (1) sacerdote y al menos 10 personas pertenecientes a la feligresía y/o trabajadores de oenegés católicas”, detalla la organización.

De acuerdo con el informe que le toma el pulso a la represión política en Nicaragua, entre junio y julio se ha desplegado una la escalada represiva contra miembros de la Iglesia católica, miembros del clero religioso, opositores y activistas políticos que aún permanecían en el país y estaban vinculados a algún espacio social o político. 

"Las personas pertenecientes al clero religioso son las más afectadas, experimentando hostigamientos, amenazas y medidas administrativas como el congelamiento de cuentas bancarias, lo cual ha sido reportado por varias entidades religiosas", indica el reporte que abarca del 20 junio al 31 de julio.

HAY UN SUBREGISTRO DE DETENCIONES POLÍTICAS

El organismo advierte de un subregistro en el número de presos políticos debido a la falta de acceso a la información y del ambiente de represión y amenaza que ejerce el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo en contra de la población.

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También continúan las amenazas y hostigamientos y amenazas contra la población, ya que la Policía Orteguista ha incrementado las visitas domiciliares a quienes cuestionan por actividades cotidianas.

"Denuncias han reportado la exigencia de informar cualquier movimiento fuera del hogar, sumado a la prohibición de encuentros y reuniones con terceros. Teléfonos móviles y computadoras de los residentes son inspeccionados sin presentar orden o justificación alguna. Frente a las inquietudes planteadas, los agentes simplemente responden que se encuentran ´bajo investigación´", advierte el Mecanismo.

NO INFORMAN SOBRE DETENIDOS

Un patrón que detectaron es que la Policía Orteguista continúa ocultando a los familiares el paradero de los detenidos. Esto causa incertidumbre, zozobra y ansiedad entre los familiares y los ubica en una condición de "desaparición forzada por ocultamiento de paradero" durante semanas y meses.

"Durante este periodo, los derechos de estas personas son vulnerados y su salud se resiente debido a la falta de acceso a alimentos y medicamentos, incluso en situaciones de enfermedades crónicas y entre la población de edad avanzada", advierte el organismo.

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De los 78 presos políticos, unos 14 se enfrentan a una segunda o tercera encarcelación. La mayoría de los presos políticos (18) están en el Sistema Penitenciario Nacional conocido como La Modelo en Tipitapa, 13 en Masaya, siete en Estelí, y el resto distribuidos en los distintos penales del país.

El Mecanismo es un organismo integrado por organizaciones de derechos humanos, de familiares de personas presas y excarceladas políticas, abogadas y abogados defensores de personas presas políticas, así como también de espacios de documentación y redes de activistas territoriales y digitales.