Claves de la polémica ley antimigrante SB4 de Texas, una de las más radicales en la historia de Estados Unidos

Inhumana, radical e inconstitucional. Así califican activistas, defensores de derechos humanos y el propio Gobierno de Estados Unidos la Ley SB4 de Texas, una controvertida ley migratoria que convertiría en delito el que un extranjero cruce de manera irregular a territorio texano desde México y que facultaría a la Policía estatal para detener, encarcelar y expulsar a migrantes indocumentados.

La norma ha suscitado un choque entre el gobierno estatal de Texas y el gobierno fenderal de los Estados Unidos. Estaba previsto que entrara en vigor el 5 de marzo de 2024, pero un choque legal que genera incertidumbre entre miles de migrantes la puso en pausa hasta ser puesta en vigor, aunque de manera fugaz, el pasado martes 19 de marzo.

Su aplicación desató caos cuando la Suprema Corte de Estados Unidos primero permitió aplicar la ley y en la noche del mismo 18 de marzo el tribunal de apelaciones del Quinto Circuito suspendió su implementación hasta que sus magistrados emitan un fallo definitivo.

ARRESTO, MULTA, CÁRCEL Y DEPORTACIÓN SIN MEDIACIÓN

El Proyecto de Ley Senatorial 4 (conocido como SB4) es una legislación estatal que endurece las medidas contra la inmigración irregular en Texas. La iniciativa ha estado en el centro de la polémica, desde su aprobación en diciembre del año pasado por la Legislatura de Texas: es calificada de inconstitucional y violatoria de los derechos humanos.

La Ley SB4 convierte en delito menor el ingreso o intento de ingreso a Texas desde una nación extranjera de forma irregular.

Faculta a los policías estatales a detener a cualquier individuo que consideren "sospechoso" de haber ingresado por puntos ciegos de la frontera de México.

En el caso de que el infractor sea reincidente, el ingreso irregular se convierte en un delito grave que contempla un casitgo de seis meses hasta 20 años de prisión. En caso de faltas menores, la norma establece multas de hasta 2 000 dólares.

La SB4 también permite que la Justicia estatal procese a migrantes irregulares y expulsarlos a México sin mediar proceso legal.

Para contrarrestar las llegadas irregulares, la ley asigna una partida de 1 500 millones para que Texas construya su propio muro fronterizo. Contempla asiganar de 20 a 30 millones de dólares de los impuestos que aportan los residentes de Texas por 1,6 km para construir el muro.

EL GOBIERNO Y DEFENSORES CONTRA LA LEY SB4

El Gobierno del presidente Joe Biden se ha puesto a la cabeza de los grupos que rechazan la aplicación de la Ley SB4, al considerarla inconstitucional. Como principal argumento legal defienden que las autoridades locales no tienen jurisdicción para tomar medidas en materia migratoria.

La ley migratoria de Texas volvió este miércoles 20 de marzo a un tribunal de apelaciones, que deberá decidir si se autoriza o no aplicar la normativa.

El panel, compuesto por tres jueces federales, se dio cita para escuchar los argumentos de los abogados del gobernador Greg Abbott y del Gobierno de Joe Biden, enfrentados sobre la gran pregunta de quién tiene la potestad para ejercer las leyes migratorias de Estados Unidos en la zona fronteriza.

Al bloque que busca frenar la controvertida ley se suma México este jueves, cuando ha anunciado la introducción de un escrito legal de rechazo, avanzó la canciller mexicana Alicia Bárcena.

México hará todo por detener lo que consideró que es una “medida antiinmigrante, xenófoba y discriminatoria”.

La secretaria de Relaciones Exteriores también recordó que México mantendrá su postura en contra de que los migrantes afectados por esta nueva norma en Texas sean repatriados a México.

“No aceptaremos, bajo ninguna circunstancia repatriaciones de autoridades de Texas”, apuntó.

En el mismo sentido se ha pronunciado el presidente Andrés Manuel López Obrador, quien avisó que el Gobierno de México no aceptará a migrates deportados por Texas si entra en vigor la “ley draconiana” SB4.

“Si pretendieran deportar, por ejemplo, que no les corresponde, nosotros no aceptaríamos deportaciones del gobierno de Texas, de una vez lo adelanto, y no nos vamos a quedar con los brazos cruzados", expresó el mandatario.

MIGRANTES EN VILO EN MEDIO DEL ESTIRA Y ENCOGE LEGAL

Mientas las disputas judiciales se suceden en los tribunales de Estados Unidos, la situación en la frontera Ciudad Juárez y El Paso (EEUU) es dramática.

Más de un centenar de personas en movilidad quedaron varados por horas entre la cerca de navajas y el río Bravo, donde aguantaron vientos de hasta 40 kilómetros por hora y temperaturas cercanas a los cero grados mientras imploraban por agua y comida, reportó la agencia EFE.

Los migrantes señalan que siguen saliendo de su país por la falta de trabajo y de seguridad pública en una ruta en la que arriesgan su vida hacia Estados Unidos.

“Lo hemos pasado muy duro, el tren, cerros, lomas, para pasar los retenes ha sido muy duro. Pero queremos pasar para buscar una mejor vida, por nuestros hijos y todo. Porque en nuestro país no hay trabajo no hay nada”, afirmó María José Gutiérrez González, de Nicaragua, mientras llora de frustración sentada en la orilla del río.

UN DRAMA EN MEDIO DE INTERESES ELECTOREROS

“Estamos con miedo o sea aquí estamos arriesgándolo todo: que nos regresan a nuestro país, o de pronto, Dios quiera, que nos den la oportunidad de que nos procesen y nos dejen ingresar a los Estados Unidos para poder trabajar y ayudar a nuestra familia de aquel lado, porque ellas se encuentran en Venezuela”, declaró el venezolano Miguel Perdomo, mientras esperaba este miércoles para cruzar el Río Bravo a través del punto 36 entre de la frontera entre Juárez y El Paso, un lugar donde nuevamente hay mucha presencia de personas en movilidad.

El Pastor Gigio Heredia, director del albergue Hope Center en Ciudad Juárez subrayó que esta ley agrega un desaire más a la travesía difícil que han tenido los migrantes hasta la frontera con Estados Unidos

“Pues yo la califico como una ley inhumana porque, la verdad, no están cometiendo ningún crimen, ningún delito. Yo creo que es un riesgo todavía mayor para su vida el hecho de que vayan a poder atentar en contra de la libertad de ellos, y pues siendo que no son criminales verdad”, explicó

Heredia también señaló que es lamentable que el tema político esté pesando tanto sobre la forma en la que el gobierno texano está tratando a los migrantes, en plena campaña electoral para las elecciones presidenciales de Estados Unidos que tendrán lugar en noviembre.

Todo ello en medio del flujo migratorio inédito de los últimos años en la región, donde México reportó una subida de cerca del 77 % en la migración irregular en 2023, con más de 782.000 extranjeros indocumentados detectados.