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William Grigsby reaparece en un canal de la dictadura para alabar a Tomás Borge

Revista En Vivo, de Canal 4, lo presentó como director de radio La Primerísima, luego de que El 19 Digital informó que la periodista Tirsa Sáenz era quien ocupaba ese cargo.

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Grigsby, a la derecha, en la pantalla de Canal 4 hablando bien de Tomás Borge.
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Despacho 505
  • abril 30, 2024
  • 11:21 AM

El periodista y agitador de la dictadura de Daniel Ortega y Rosario Murillo, William Grigsby Vado, reapareció este martes en la revista En Vivo del oficialista Canal 4, programa en el que se dedicó a hablar bien del fallecido comandante Tomás Borge.

En la introducción de la entrevista, el periodista Alberto Mora presentó a Grigsby como director de radio La Primerísima y militante sandinista, a pesar de que, en días recientes, el también oficialista El 19 Digital publicó que la directora de dicha emisora es la también periodista sandinista Tirsa Sáenz.

William Grigsby reaparece tras rumores de que ya no era el director de La Primerísima. No había comparecido públicamente desde el pasado mes de octubre de 2023, cuando se emitió en dicha radio la última edición de su programa Sin Fronteras. Desde entonces, existían rumores de que había sido destituido de su puesto al frente de la radio.

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Precisamente, desde las protestas de 2018, Grigsby había utilizado su programa para defender los crímenes de la dictadura. Se plegó al discurso de Rosario Murillo y se dedicó a vociferar contra los opositores, entre ellos empresarios, sacerdotes y otras voces opuestas al régimen.

Maravillas sobre Tomás Borge

La presentación de Grigsby en el Canal 4 se produce en ocasión de la conmemoración del 12 aniversario de la muerte del comandante de la revolución sandinista Tomás Borge Martínez, ocurrida el 30 de abril de 2012.

En la entrevista, William Grigsby habló de un Tomás Borge que siempre fue leal al dictador Daniel Ortega, a pesar de que hubo personas que le decían que merecía ser el líder máximo del sandinismo porque era fundador del Frente Sandinista (FSLN) y era mejor líder que Ortega.

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Habló, entre varias maravillas, de un Tomás que era benévolo y perdonó a sus torturadores cuando triunfó la revolución sandinista en 1979.

El verdadero Tomás Borge

Sin embargo, el Tomás Borge que está en el imaginario nicaragüense es uno muy distinto al que describió Grigsby.

Como uno de los nueve comandantes sandinistas que gobernó Nicaragua en la década de los ochenta del siglo pasado, Borge fue responsable directamente y corresponsable de diferentes crímenes contra la población nicaragüense, como el desplazamiento forzado de los miskitos en diciembre de 1981, en un hecho conocido como La Navidad Roja.

Ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), fue denunciado por torturas contra los prisioneros políticos, especialmente exguardias de Somoza, incluyendo casos de asesinatos contra ellos.

Se le vinculó al narcotráfico internacional cuando su secretario personal, Federico Vaughan, fue fotografiado por el piloto estadounidense Barry Seal junto al capo colombiano Pablo Escobar, cargando sacos de cocaína en una avioneta en el aeropuerto Los Brasiles, en Managua. Recientemente, el exnarcotraficante colombo-alemán Carlos Lehder escribió en un libro que Tomás Borge le dio refugio en los años ochenta.

Además, las militantes sandinistas, la comandante guerrillera Leticia Herrera y la militante fundadora del FSN, Rossy López Huelva, lo acusaron de haber intentado violarlas.

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