Casi 1.000 denuncias por violación y abuso sexual en lo que va del año, las niñas serían las principales víctimas

Entre el 1 de enero y el 5 de junio de este año, la Policía Orteguista ha recibido al menos 977 denuncias por violación y abuso sexual en todo Nicaragua. La institución no informa al detalle quiénes son los principales agresores y víctimas, pero admite que 2 de cada 10 casos no han podido ser resueltos.  

La Policía reporta que ha resuelto 435 casos de violación y 360 de abuso sexual, para una efectividad del 81%. La Policía se limita a informar la cantidad de casos resueltos sin informar claramente la cantidad de denuncias recibidas.  

Sin embargo, el porcentaje de efectividad permite deducir que han recibido al menos 537 denuncias por casos por violación y 440 por abusos sexuales. 

En promedio, ocurre un caso de violación o abuso cada cuatro horas y seis por día. De parte de la Policía no hay información detallada que permita saber quiénes han sido las principales víctimas y agresores, pero hace un especial llamado a madres y padres de familia “cuidar” a niños, niñas y adolescentes y “fomentar el respeto a cada uno de los integrantes de la familia”.  

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“Esto significa que las principales víctimas siguen siendo menores de edad y el lugar más inseguro sigue siendo su propia casa”, señala una activista defensora de los derechos de las mujeres y niñas.  

LAS NIÑAS SIGUEN SIENDO LAS PRINCIPALES VÍCTIMAS 

Según el informe anual 2023 del Instituto de Medicina Legal, las principales víctimas siguen siendo las niñas de entre 12 y 17 años. 

Las niñas continúan siendo las principales víctimas de la violencia sexual en Nicaragua y muchos de estos casos acaban en embarazos no deseados. Aunque en menor medida, la violencia sexual también afecta a los hombres, el 18% de las víctimas son varones, la mayoría menores de 18 años, según los peritajes realizados por Medicina Legal. 

La situación de desamparo aumenta debido a que el régimen ha desmantelado las redes de apoyo que trabajan en el país para prevenir estos delitos.  

“Estos números son una realidad y refleja la inseguridad que viven las mujeres, niñas, niños y adolescentes. Hay una ausencia de políticas públicas que realmente vayan dirigidas a frenar y prevenir las agresiones sexuales”, critica una experta en casos de abuso sexual.  

El abuso sexual consiste igualmente en el acceso al cuerpo de otro con fines sexuales sin su consentimiento, pero sin el empleo de violencia, en estos casos, generalmente, los abusadores suelen estar en casa.  

La violación sexual, por el contrario, es el acto de acceder al cuerpo de una persona sin su consentimiento para una actividad sexual. Este acto puede conllevar penetración.

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El Código Penal de Nicaragua establece que “toda relación sexual con una persona menor de 14 años, aun cuando ella alegue consentimiento, es considerado delito de violación y debe penarse con prisión de entre 12 y 15 años.  

En general, el año pasado el 70% de los agresores eran conocidos de las víctimas y por eso es importante hablar de abuso sexual en las casas, dicen las expertas. 

La socióloga y feminista María Teresa Blandón ha explicado en ocasiones anteriores que hay familias que, lamentablemente, no son un factor de protección de la niñez porque no se habla de la violencia, no sea habla del abuso sexual, no se enseña a sospechar de los adultos, a sospechar de determinados gestos.