Ortega se quedará en el poder, pero pondrá a Nicaragua a las puertas de su peor depresión económica
La revista especializada The Economist Intelligence Unit ve al orteguismo en el poder hasta 2025, sin embargo augura un panorama adverso provocado por la crisis sociopolítica y la pandemia de coronavirus.


- October 30, 2020
- 12:00 AM
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Los últimos tres informes sobre Nicaragua de la prestigiosa firma británica The Economist Intelligence Unit (EIU) apuntan a que Daniel Ortega continuará en el poder por un período más, es decir hasta 2025. “A pesar de que Ortega puede hacer modestas concesiones a la reforma electoral en un intento de legitimar a nivel internacional las próximas elecciones, es probable que sean superficiales, ya que el Frente Sandinista (FSLN) mantendría el control sobre el Consejo Supremo Electoral, el Poder Judicial y otras instituciones importantes”, reza el análisis más reciente.
La revista especializada, de consulta de inversionistas a nivel internacional, plantea que ante la probable falta de una solución negociada a la crisis sociopolítica que vive el país desde abril de 2018 “esperamos que Ortega (o un candidato de su elección) permanezca en el poder en el período de pronóstico 2021-2025”. Sin embargo, ese férrea entronización impedirá que la economía despegue ante la falta de financiamiento externo.
La proyección de The Economist esboza una economía que podría caer en una profunda depresión, peor que a la de 1989. A la causa de la crisis sociopolítica se le agrega la pandemia de coronavirus. “Las perspectivas económicas de Nicaragua en 2021-2025 se verán empañadas por la preocupación de los inversores y la falta de confianza en el Estado de Derecho. Una recesión que comenzó en 2018 y se profundizará significativamente debido al brote de coronavirus”, señala.
Además, estima que el Producto Interno Bruto (PIB) se contraerá 7% en 2020, mientras que las perspectivas de recuperación a un corto plazo son sombrías. Este escenario contrasta con el positivismo oficial, pues el pasado 16 de octubre, el presidente del Banco Central de Nicaragua (BCN), Ovidio Reyes, afirmó que la economía del país había entrado a una fase de recuperación.
Reyes, compareció hace dos semanas para presentar el informe Estado de la Economía Nicaragüense, en el que informó que la economía caerá 4.5% en 2020, aunque evitó brindar alguna proyección de crecimiento para 2021, pese a que mediados de año señaló que habría una recuperación y que por fin se lograría un número positivo al crecer 1.5%.
“Durante el primer trimestre de 2020, la economía mantuvo la trayectoria de estabilización y recuperación que se venía observando desde mediados de 2019. Sin embargo, en el segundo trimestre, el impacto del Covid-19 afectó principalmente a las actividades económicas relacionadas con el sector turístico: hoteles y restaurantes, y de servicios en general. A principios del tercer trimestre, por el contrario, han surgido señales económicas de recuperación”, señaló entonces, Reyes.
En medio de tanto optimismo, Reyes dijo que si bien la pandemia afectó la economía, ha sido menor a la observada en el resto de los países de la región centroamericana y República Dominicana. En el caso de Nicaragua, los meses más críticos fueron abril y mayo.
No obstante, The Economist alerta de que la pandemia sigue siendo una amenaza para el país y no descarta que para 2021 se desate una segunda ola que empañará las perspectivas para la mayoría de las actividades de servicios, eso sumado a la actual crisis que provocarán que la economía no crezca, al contrario caiga 1.2%, cumpliendo así cuatro años consecutivos de contracción.
El desastre económico se debe en gran medida al aumento de la inestabilidad política en el país mientras se acercan las elecciones generales y que podrían desencadenar un malestar social. Otro punto que mella sobre el país es que existe la posibilidad de nueva fuga de dinero de los bancos como ocurrió en 2018. “Suponiendo que cualquier inestabilidad relacionada con las elecciones sea de corta duración, esperamos que una recuperación se materialice en 2022, con un crecimiento del PIB del 3.2 por ciento en ese año”, puntualiza.
El Banco Central de Nicaragua ha estimado una proyección de crecimiento entre 2022 y 2024 de 2.6% en promedio, sin embargo, los investigadores de la firma británica consideran que entre 2024 y 2025 crecerá a un ritmo promedio 1.5%. “Nuestras perspectivas a medio plazo se ven empañadas por la ausencia de una solución al conflicto político de Nicaragua, que mantendrá el sentimiento empresarial moderado por el futuro previsible”, enfatiza The Economist.