Monseñor Silvio Báez reacciona indignado ante secuestro de tres sacerdotes

El obispo auxiliar de Managua, monseñor Silvio Báez, reaccionó indignado por la escalada represiva de la dictadura contra la Iglesia católica, que ha dejado tres sacerdotes presos en las últimas 72 horas.

Monseñor Báez calificó de secuestro la detención de monseñor Pablo Villafranca, párroco de Nuestra Señora de Veracruz de Nindirí; monseñor Carlos Avilés, vicario general de la Arquidiócesis de Managua; y del padre Héctor Treminio, párroco de la iglesia Santo Cristo de Esquipulas de Managua.

"Me indigna el injusto secuestro de tres queridos sacerdotes de Managua de parte de la criminal dictadura sandinista: P. Pablo Villafranca, Mons. Carlos Avilés y P. Héctor Treminio, pastores y profetas", expresó en un tuit monseñor Báez, uno de los primeros religiosos católicos forzados al exilio por la persecución se la dictadura de Daniel Ortega.

LAS DETENCIONES

Monseñor Avilés y el padre Treminio fueron detenidos con apenas horas de diferencia. Según una fuente policial, Avilés fue detenido en la noche del miércoles y trasladado a la Estación 3 de la Policía Orteguista.

Sobre la detención del padre Héctor Treminio, solo se conoce que fue forzado a subir a un vehículo particular con la promesa de que era para una entrevista. Según denunciaron pobladores de esa comunidad que presenciaron la detención, en la zona permanece una patrulla policial.

A tres días de concluir el año, la dictadura mantiene en prisión a cinco religiosos católicos: el obispo de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez; el obispo de Siuna, Isidoro Mora; monseñor Carlos Avilés, monseñor Pablo Villafranca y el padre Héctor Treminio.

Este operativo forma parte de un operativo del régimen para silenciar a la Iglesia católica de Nicaragua y prohibir que en las homilías se eleven plegarias por el bienestar de monseñor Álvarez.

En su pronunciamiento, Baéz oró por los religiosos y porque "sean liberados de inmediato!".