La dictadura se hace de otro grupo de al menos 13 sacerdotes y dos seminaristas presos políticos

El padre Raúl Zamora de la parroquia Divina Misericordia, monseñor Miguel Mántica de la parroquia San Francisco de Asís, en Managua, fueron detenidos la madrugada de este sábado por la Policía Orteguista en medio de una intensificación de la persecución a la Iglesia católica en Nicaragua por parte de la dictadura.

En los últimos diez días la dictadura ha detenido a un obispo, 12 sacerdotes y dos seminaristas que se suman a monseñor Rolando Álvarez, obispo de Matagalpa, como nuevos presos políticos.

Monseñor Silvio Fonseca, vicario de Familia, Vida e Infancia de la Arquidiócesis de Managua y el padre Mykel Monterrey, a cargo de la parroquia Nuestra Señora de Candelaria fueron detenidos el viernes.

"Sigue la furia de la criminal dictadura de Ortega desatada contra la Iglesia. Otro querido sacerdote de la Arquidiócesis de Managua ha sido secuestrado hoy: Mons. Silvio Fonseca. Mi cercanía fraterna y mi oración por él. ¡Libertad para él y para todos los sacerdotes!", reaccionó monseñor Silvio Báez, obispo auxiliar de Managua, desde su cuenta de X (antes Twitter).

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#Nicaragua. Sigue la furia de la criminal dictadura de Ortega desatada contra la Iglesia. Otro querido sacerdote de la Arquidiocesis de Managua ha sido secuestrado hoy: Mons. Silvio Fonseca. Mi cercanía fraterna y mi oración por él. ¡Libertad para él y para todos los sacerdotes!

— Silvio José Báez (@silviojbaez) December 30, 2023

Durante la noche de este mismo viernes, pobladores del barrio Américas 1 denunciaron el secuestro del padre Mykel Monterrey, sacerdote de la Iglesia Nuestra Señora de Candelaria.

El padre Mykel fue quien desmintió el supuesto secuestro a Telémaco Talavera en la UPOLI, durante las protestas del 2018. También brindó atención y resguardo a los estudiantes perseguidos por la Policía Orteguista.

Horas antes también fueron detenidos los sacerdotes Fernando Calero y monseñor Marcos Diaz Prado.

NO SE DESCARTAN NUEVAS DETENCIONES

Desde el 20 de diciembre, la dictadura ha emprendido su persecución contra líderes religiosos que han pedido oraciones por monseñor Rolando Álvarez (obispo de Matagalpa), condenado a 26 años de cárcel.

El obispo de Siuna, monseñor Isidro Mora Ortega fue detenido el 20 de diciembre. Ese mismo día también fueron secuestrados los seminaristas Alester Saenz y Tony Palacios, de Siuna. Siguió la ola de secuestros contra monseñor Oscar Escoto, Vicario general de la Diócesis de Matagalpa; monseñor Carlos Avilés, vicario general de la Arquidiócesis de Managua; el padre Pablo Villafranca; y el padre Héctor Treminio Vega.

Este viernes 29 de diciembre, a dos días de terminar el año continuó la ola de detenciones en contra de monseñor Silvio Fonseca, de Managua; monseñor Marcos Díaz de León; el padre Fernando Calero de Matagalpa y el padre Mykell Monterrey de Managua.

De momento, ni la Arquidiócesis de Managua, ni la Conferencia Episcopal de Nicaragua se han referido a estas detenciones.