Rosario Murillo califica como "castigo" las sanciones impuestas en su contra

La vocera gubernamental y sancionada vicepresidente, Rosario Murillo, tildó este martes como "castigo" las sanciones impuestas en su contra por los gobierno de Canadá, Estados Unidos, Suiza, y la Unión Europea (UE), por atentar contra los derechos humanos y la democracia en Nicaragua.

Murillo en su intervención exigió respeto a los gobiernos que la han sancionado, "porque ya no queremos injerencia de extranjeros".

"También hay una pandemia de agresiones contra los pueblos, en tantas partes, les llaman sanciones, pero son agresiones, porque quién ha facultado a alguien para establecer, castigos, porque sanciones quiere decir castigo", señaló Murillo.

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Las sanciones impuestas contra Murillo le impiden viajar a los países emisores ni hacer negocios con sus nacionales, y sus bienes en esos territorios están congelados.

Sin embargo, los países y organismos que han sancionado a una treintenas de funcionarios nicaragüenses, entre ellos Murillo, sus hijos y allegados, han sido explícitos en afirmar que las sanciones están dirigidas a personas de forma individual, no a Nicaragua como nación.

"Respeten, respeten, respeten, esa es la clave, por eso decimos: también es pandemia la falta de respeto a la voluntad de los pueblos, también es pandemia, fruto del egoísmo, de la avaricia, de la codicia, la soberbia, la supremacía, quieren mostrarse como dueños del mundo", reiteró la vocera gubernamental.

SANCIONES

Al igual que Murillo, empresas ligadas al Frente Sandinista, han sido objeto de sanciones internacionales por razones similares.

Las sanciones se han establecido en el marco de la crisis sociopolítica que vive Nicaragua desde 2018, cuando al menos 328 personas murieron en protestas antigubernamentales, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), de las cuales Ortega ha reconocido 200 y denunciado que se trató de un intento de golpe de Estado.

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Ortega y Murillo esperan ser reelegidos el próximo 7 de noviembre próximo, en un proceso electoral que ha recibido críticas desde la oposición y la comunidad internacional por supuesta falta de transparencia y el arresto de aspirantes a la presidencia.

Tanto la opositora Unidad Nacional Azul y Blanco, como el no gubernamental Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh), Amnistía Internacional, Estados Unidos y la UE, han mostrado sus dudas sobre dichas elecciones.

Con información de EFE