¿Qué busca Ortega con un nuevo diálogo?

Analistas y opositores coinciden en que el diálogo ofrecido por Ortega es solo una estrategia para legitimarse.

None
default.png
  • octubre 14, 2021
  • 03:41 AM

El régimen de Daniel Ortega ha vuelto a poner en foco su idea de convocar a un “diálogo nacional” después de las votaciones del 7 de noviembre en las que obtendría su tercera reelección.

El pasado mes de enero, en su primera aparición pública Ortega planteó su voluntad de llamar a un diálogo después de los comicios. No ahondó en detalles ni volvió a pronunciarse al respecto. Fue por medio del diputado Walmaro Gutiérrez que esta semana, nueve meses después y a las puertas de conseguir su permanencia en el poder, desempolvó la oferta, pero ¿qué buscaría Ortega integrando una mesa multisectorial?

Analistas consultados por DESPACHO 505, coinciden en que persigue legitimarse después de las votaciones, dialogando con los que considera sus aliados y no con la verdadera oposición del país.

Para la especialista en Ciencias Sociales Haydée Castillo, este ofrecimiento de “diálogo nacional” es como un “anzuelo” que lanza sabido del desconocimiento mundial al que se enfrenta.

“Quiere (Ortega) que la comunidad internacional crea que él va a establecer un diálogo dentro de Nicaragua una vez que sus elecciones sean reconocidas”, dice Castillo, quien era directora del Instituto de Liderazgo de Las Segovias, cuyas instalaciones fueron confiscadas, tras la cancelación de su personería jurídica en el año 2018.

NO SE PUEDE CONFIAR EN ORTEGA

Castillo sostiene que una farsa de ese tipo no "engañará" ni a la ciudadanía ni a la comunidad internacional, ya que en 2018 y 2019 Ortega accedió a negociar y asumió compromisos que a la fecha no cumple.

“Cualquier cosa que Ortega diga en este momento es solo para aparentar que él es una persona dialogante, todo el mundo sabe que la dictadura Ortega -Murillo está caracterizada por ser una dictadura criminal”, dice Castillo.

Alexa Zamora, miembro de la Unidad Nacional Azul y Blanco, tampoco confía. "Nosotros no reconocemos este tipo de llamados, recordando que el régimen tiene una deuda con la ciudadanía nicaragüense con base en los acuerdos del 2019”, entre estos la liberación de los presos políticos y el restablecimiento de las libertades en el país.

LEA TAMBIÉN: Max Jerez hasta este miércoles se enteró del fallecimiento de su mamá Heydi Meza

UN DIÁLOGO "SIN FUTURO"

El politólogo costarricense Carlos Murillo, especialista en relaciones internacionales, no le ve futuro a un diálogo nacional en el que ofrecería "resolver" algunas demandas y a cambio tendría "otro periodo para ir buscando la reelección en unas nuevas elecciones”.

“Sentarse en la mesa de negociación con el presidente, dictador electo, es legitimarlo como gobernante”, advierte Murillo quien ve replicado en Ortega el esquema de diálogo de Nicolás Maduro, el dictador de Venezuela.

OTRA LECTURA

En un seminario titulado ¿Qué pasará después de las desiguales elecciones en Nicaragua?, promovido por la organización internacional Crisis Group, los panelistas dieron como un hecho la reelección de Ortega ante la falta de competencia política y también la de un inmediato desconocimiento de los resultados de una parte de la comunidad internacional, principalmente de Occidente.

Ante ese escenario de ilegitimidad, Ortega buscará cómo recomponer su imagen a nivel internacional y legitimarse de alguna manera después de las elecciones, opinó el académico Ernesto Medina, exmiembro de la Alianza Cívica por la Justicia y la Democracia, que fue la contraparte del Ejecutivo en dos fallidas negociaciones con las que se buscaba una salida a la crisis que estalló en abril de 2018.

De lo contrario, advirtió Medina, la crisis de Nicaragua "se va a seguir profundizando y todo apuntaría a que más temprano que tarde el país va a entrar en una crisis muy profunda donde el gran perdedor terminará siendo Daniel Ortega".

Por tanto, para el académico, es posible que Ortega libere a los "presos políticos" de forma gradual tras las elecciones, flexibilice algunas leyes catalogadas de represivas, y convoque a un nuevo diálogo, todo con el fin que su nuevo Gobierno tenga legitimidad.

LEA TAMBIÉN: CSE inicia revisión de boletas electorales, pero no dice cuánto costarán ni quién las imprimirá

¿Con quién dialogaría Ortega? El diputado Walmaro Gutiérrez apartó de entrada a aquellos opositores que han demandado libertades y el regreso a la democracia en el país.

“El diálogo es con él mismo, con sus cómplices, con los partidos zancudos que van a esta farsa electoral, ese no puede ser un dialogo creíble, porque la verdadera oposición a su régimen no son los partidos zancudos ni es ese gran capital que está en silencio”, cuestionó Haydée Castillo, quien considera que los movimientos sociales, el campesinado, estudiantes, exiliados, entre otros sectores, deberían tener voz y voto.

UN DIÁLOGO QUE NO BENEFICIE A ORTEGA

Gema Santamaría, investigadora Marie Curie del Instituto de Estudios Avanzados de Friburgo (Alemania), opina que sería deseable que se crearan canales de diálogos y de negociación en Nicaragua, sin embargo mostró preocupación de que este permite legitimar a Ortega, "y que entonces la oposición sea paralizada y no haya una promesa ni una ruta clara para desmantelar el aparato represor que se ha institucionalizado a través de leyes".

Para Santamaría, el gran reto sería cómo lograr que una apertura a un diálogo "no sirva simplemente de nuevo para legitimar al Gobierno Ortega-Murillo, y por otro lado paralizar a la oposición".

El exembajador Marcelo Valle, también cree en el diálogo, siempre y cuando sea abierto y sin imposiciones. “Si el diálogo evita tomar el toro por las astas, abordar la verdad, la justicia y la reparación, será una charla efímera, sin anclaje en la realidad del conjunto de la población”, señaló el exdiplomático argentino.

*Con información de EFE

Ayúdanos a romper la censura, necesitamos tu apoyo para seguir informando

Donar