Monseñor Álvarez llama a sacerdotes a cerrar fila ante quienes quieren ver a la Iglesia “destruida y pisoteada”
La dictadura Ortega-Murillo ha amenazado con enjuiciar y confiscar bienes a sacerdotes.


- mayo 11, 2022
- 11:38 PM
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El obispo de la Diócesis de Matagalpa y administrador apostólico de la Diócesis de Estelí, monseñor Rolando Álvarez, llamó a todo los católicos de Nicaragua y en especial al clero, a mantenerse unidos contra los que quieren ver destruida y pisoteada a la Iglesia Católica, y advirtió que hay en el país una fuerza “diabólica” que quiere dividir a la institución religiosa.
“Aprovechando nuestras diferencias, que son vistas desde la luz de Cristo, tenemos que estar unidos contra los enemigos de Cristo, unidos contra los enemigos de la Iglesia, contra los que no nos quieren, unidos contra los que nos quisieran ver destruidos, pisoteados, para terminar con la alegría del pueblo”, dijo el obispo.
Monseñor Álvarez pronunció ese llamado durante una homilía celebrada este miércoles en Estelí, en ocasión del último día de formación permanente del clero de las diócesis matagalpina y esteliana. No es la primera vez que el líder religioso hace alusión a que existe alguna amenaza de ataques que buscan dividir y debilitar a la Iglesia, pero ahora sus palabras cobran relevancia tras conocerse que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo prepara reformas legales para enjuiciar y confiscar a sacerdotes.
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El pasado 4 de mayo, los diputados orteguistas aprobaron un “informe de consulta a las leyes penales”, en el que aseguran que unas supuestas “víctimas del intento de golpe de estado del 2018” pidieron que las penas sean más severas para los supuestos delitos de traición a la patria.
"LOS SACERDOTES SOMOS LUZ"
Los operadores orteguistas en la Asamblea Nacional aseguran que los consultados pidieron “justicia para con los religiosos y directores de organizaciones de derechos humanos que se involucraron en la aventura golpista".
Los diputados del régimen expresaron en ese informe que “en el carácter en que cometieron los (supuestos) delitos (los sacerdotes) no fue como pastores ni representantes de Cristo, ni para proteger los derechos humanos, sino de manera personal con saña y odio a la militancia sandinista y a personas relacionadas con el Gobierno y por eso deben ser juzgados y sus comunidades y organizaciones deben ser investigadas”.
Dicho informe ha sido interpretado como una clara amenaza de parte de la dictadura contra los obispos y sacerdotes, principalmente contra los que han sido críticos y denunciantes de la represión y la deriva dictatorial de Ortega y Murillo.
FUERZAS MALIGNAS QUIEREN DIVIDIR A LA IGLESIA
Ante los sacerdotes de las diócesis que dirige, monseñor Álvarez advirtió que hay dos tentaciones y seducciones contra las que tienen que batallar: “la envidia y la soberbia, porque son tentaciones del demonio que van dirigidas a dividirnos, y el diablo es el padre de la mentira y la división”.
“El diablo quiere dividir a la iglesia, y seamos claros y directos, el diablo quiere dividir a la iglesia en Nicaragua. Quiere introducir el espíritu mundano, el diablo quisiera que nos tuviéramos envidia entre nosotros, porque sabe que la división nos debilita”, advirtió el sacerdote.
Asimismo, destacó que están conscientes que enfrentan “una lucha contra potestades del mal, y la fuerza que tenemos como clero, como Diócesis, como Iglesia, es la unidad, que debe ser incorruptible, que procediendo de Cristo debe ser intachable”, dijo.