Presuma que toda comunicación está intervenida: ¿Cómo enfrentar el espionaje del régimen Ortega-Murillo?

Se descubrieron 39 antenas falsas en varios puntos de Nicaragua, capaces de interceptar comunicaciones telefónicas de la ciudadanía nicaragüense, según un análisis de la organización South Lighthouse -dedicada a investigar tecnologías al servicio de los derechos humanos- y el estudio Fake Antenna Detection Project (FADe Project).

El estudio no detalla quiénes operan esas falsas antenas, pero algunas personas conocedoras sobre cómo el régimen de Daniel Ortega y Rosaro Murillo espía a los nicaragüenses, como el exmayor Roberto Samcam, indican que es una práctica de vieja data.

DESPACHO 505 consultó a una experta en seguridad digital y lo primero que comentó es que "la seguridad informática" es muy importante en las democracias y que en la actualidad hay una vigilancia constante de todas las personas a través de las computadoras y los teléfonos celulares, no solo de los gobiernos, sino también de las empresas, las policías, los ejércitos y las agencias de seguridad.

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La experta, que pide no se le identifique porque, aunque está en Costa Rica, sigue muy de cerca la situación en Nicaragua, indica que una buena analogía sería comparar los dispositivos electrónicos con una casa, a la que se le deben de poner cortinas para que la gente no vea desde afuera lo que hay dentro.

Según la especialista, en términos informáticos no existe la seguridad digital y se debe de presumir que toda comunicación está comprometida. Aquí algunos consejos que brinda para comunicarse más seguro desde su teléfono celular en todo momento, y de paso burlar el espionaje del régimen Ortega-Murillo.

TELÉFONOS, EL PRINCIPAL OBJETIVO

Lo primero que se debe entender, explica la especialista, es que en el bolsillo del pantalón o de la camisa andamos un dispositivo que le sirve a ciertos sectores, especialmente los gobiernos y las empresas, para vigilarnos.

Esta vigilancia no solo tiene que ver con aspectos políticos, sino también comerciales o de publicidad, de parte de las grandes corporaciones.

Toda la información nuestra que le añadimos al teléfono, especialmente en las redes sociales, no es que se vuelva pública, sino que ya le pertenece a otros y cuesta mucho que se borre, a pesar de que las aplicaciones, como Facebook, digan que sí se puede borrar. "Ya queda como una huella, una sombra le decimos nosotros , que es complicado borrarla", explica.

Los teléfonos, agrega, son un arma de doble filo y detrás de ellos andan las corporaciones y los estados.

ENCRIPTAR PARA PROTEGER SU INFORMACIÓN

El cifrado o encriptado es la forma de resguardar los datos para que la información sea codificada y, en caso de robo del dispositivo, no se podrá leer la información si no se tiene la contraseña para desencriptar la información.

La especialista lamenta que no todos los teléfonos celulares traen esta opción de poder encriptar los teléfonos, y, en el caso de Nicaragua, que se descubrieron estas antenas capaces de rastrear las tarjetas chips o Sim card, es muy necesario encriptar el teléfono.

De hecho, cuando se vaya a insertar el chip, habría que desactivar GPS, wifi y bluetooth, igualmente para hacer llamadas y validar servicios.

El encriptado se hace yendo a la opción ajustes y buscar Seguridad. La especialista costarricense aconseja que se use una contraseña para encriptar el teléfono y nunca hacer uso de pines o de patrones.

CERRAR LAS APLICACIONES

La recomendación sería no usar correos electrónicos ni redes sociales en los teléfonos. Pero, como eso es casi imposible de pedir a la ciudadanía, la medida de seguridad mínima que puede tener una persona es cerrar los correos y las redes sociales cuando no las estén utilizando, indica la especialista de seguridad digital consultada por Despacho 505.

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Con cada medida de seguridad que las personas apliquen en sus teléfonos celulares, le hará más difícil el trabajo a los espías. Es como si un ladrón logra entrar a una casa, pero encuentra los dormitorios enllavados, o halla cajas fuertes difíciles de abrir.

NUNCA, NUNCA REPETIR CLAVES

Hay personas que usan una sola clave para todas las aplicaciones y eso es un error grave que pone en riesgo el total de su información.

En lugar de ello, explica la especialista, se deben crear una clave para cada aplicación o servicio y estas deben de ser lo más seguras posibles y fuertes.

Hay programas que ayudan a crear contraseñas fuertes. Para Windows se puede usar Keepass; para iphone y Mac, puede utilizar MiniKeepass y, para Android, KeepassDroid.

Una contraseña fuerte puede ser creativa, escribir en la lengua materna detalles que no estén en las redes o internet. Se le puede agregar números y símbolos.

Es muy importante que la contraseña no se comparte con nadie y cambiarlas al menos cada tres meses.

NO HABLAR TEMAS SENSIBLES POR TELÉFONO

Si la persona va a sostener una conversación en la que se abordaran temas sensibles, la especialista recomienda que se aleje de su teléfono celular, que lo ponga en otra habitación, por ejemplo.

Ello se debe a que en el teléfono pueden haber aplicaciones que escuchan lo que las personas están hablando. Tal vez no graban la conversación completa, pero sí recogen palabras claves.

Podría ser el caso que el régimen Ortega Murillo pague a una empresa para que rastreen las conversaciones sobre ciertas palabras claves como: dictadura, golpe, armas, chayo, entre otras.

Cuando detectan que alguien está hablando de esos temas, es cuando les comienzan a dar seguimiento de diferentes formas.

No basta con apagar los teléfonos, porque aún apagados puede que las aplicaciones funcionen. Se trata de alejarse de ellos.

USAR APLICACIONES ALTERNATIVAS

Por último, la especialista recomienda usar aplicaciones que son más seguras que las tracionales.

Por ejemplo, como navegador, aconseja usar Firefox en lugar de Google Chrome.

En mensajería, recomienda no usar WhatsApp, sino aplicaciones como Signal o Wire.

Y en vez de zoom o Google Meet, usar una aplicación que se llama jitsi Meet.

La mayoría de las aplicaciones tradicionales sus encriptados no son confiables.

De WhatsApp, por ejemplo, explica que su cifrado no es confiable, ya que esa empesa comenzó a decir que tienen cifrado para quitarse controles de encima.