El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ratificó que el próximo 30 de mayo será feriado nacional obligatorio en Nicaragua por la celebración del Día de las Madres.
El régimen suplanta al CNU sin cambiar la ley y entrega control universitario a rectores afines. Ramona Rodríguez pasa a coordinar un centro de emprendedores que aún no existe.
Mascarillas, guantes, pedazos de tela y botellas vacías de alcohol se acumulan en terminales de buses, calles principales y alcantarillado de Managua y del resto del país.
El régimen sostiene que “fortalecerá” la detección de casos, incluso en zonas fronterizas, pero se niega a aplicar las pruebas a nicaragüenses que llegan en grupos a las fronteras alegando un cobro de 150 dólares.
En homilías diferentes, los altos jerarcas de la iglesia Católica abogaron por un cambio social en el país en el que los pobres sean los protagonistas.
Sin portar mascarillas ni guardar la distancia, centenares de personas participan en actividades en honor a San Jerónimo promovidas por la Alcaldía de Masaya sin el beneplácito de la Iglesia, que suspendió todo por la pandemia.
Este domingo desde Sevilla y Pamplona, en España, condenaron la muerte del jornalero nicaragüense Eleazar Blandón y denunciaron las condiciones de sometimiento y esclavitud por parte de la “mafia del campo”.
La Policía Orteguista liberó al excanciller Francisco Aguirre Sacasa tras detenerlo por la compra de dos campanas robadas de una iglesia de Granada, pero el proceso legal en su contra continúa.
