Rosario Murillo y diputados del régimen amenazan al obispo Rolando Álvarez con cárcel por supuestamente incitar a la violencia
El diputado orteguista Wilfredo Navarro manifestó en un escrito que monseñor Álvarez "no está por encima de la ley" y que "su sotana no le da impunidad".


- agosto 05, 2022
- 09:55 AM
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La vicepresidenta Rosario Murillo amenazó con cárcel a quienes infrinjan las leyes del país, mientras que los diputados orteguistas Wilfredo Navarro y Carlos Emilio López acusaron al obispo de la Diócesis de Matagalpa, monseñor Rolando Álvarez, de estar incitando a la violencia.
Las declaraciones de los tres funcionarios del régimen de Daniel Ortega se dan en un contexto de asedio contra monseñor Álvarez, quien desde hace dos días no puede salir de la Curia Episcopal en la ciudad de Matagalpa.
Murillo en su comparecencia de este viernes, sin mencionar nombre, manifestó que Nicaragua no está para “actividades o bufonismo o bufonescos gestos que quedaron atrás”, en referencia a las procesiones y acciones de protestas espontánea que ha realizado el prelado.
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Además, manifestó que provocar y hacer ostentación de impunidad es un delito, ya que se provoca discordia y desenfreno. “Hay leyes no se puede sembrar odio ni discordia”.
“Por eso decimos, el odio desautorizado totalmente, como forma de relación entre nosotros, el exhibicionismo del odio desautorizado completamente como forma de relación entre los seres humanos, recordémonos todos que el odio es un crimen y que todo crimen es un delito y un delito que debe investigarse y luego también desde las instituciones respectivas tomar las medidas pertinentes para que nunca más la violencia o el odio pretendan arrebatarnos la paz y el derecho a caminar y avanzar”, amenazó Murillo.
ACUSACIONES DE NAVARRO EN CONTRA DE ROLANDO ÁLVAREZ POR INCITAR AL ODIO
Por su parte, el diputado orteguista Wilfredo Navarro, acusó a monseñor Álvarez, en un escrito que publicaron medios afines al régimen, de estar incitando a la violencia, al desorden, en referencia a los hechos que ocurrieron este jueves en la sede de la Curia Episcopal de Matagalpa.
El religioso se encuentra bajo cerco policial junto a doce personas más y la Policía no ha informado las razones de dicha medida. Navarro acusó a Álvarez y otros curas, cuyos nombres no reveló, de dirigir lo que el régimen de Ortega ha denominado como “golpe de Estado”, que no fueron más que protestas populares por unas fallidas reformas a la Seguridad Social.
Navarro además amenazó al religioso al señalar que “este señor Álvarez debe quedar claro que él no está por encima de la ley y con sus actitudes ha hecho que se le pierda el respeto y se le trate como a un político cualquiera”.
Calificó como “show mediático” el hecho que el obispo de Matagalpa se haya arrodillado frente a los policías que lo acosan.
“Pero hay que decirlo, este hombre no está por encima de la ley, su sotana no le da impunidad. Además no tiene ninguna moral ni autoridad para reclamar, porque él y otros curas son responsables de delitos. Hay que recordar que los curas también participaron en el golpe, fueron amnistiados y en la amnistía estaba la no repetición. Así es que el pueblo de Nicaragua debe estar claro de la actitud de este señor. La jerarquía católica debe llamarlo al orden, porque lo que está haciendo es transformando nuevamente la Iglesia en cuarteles donde se guardaban las armas y donde se planeaba la violencia contra la institucionalidad”, declaró el diputado orteguista.
Navarro indicó que el obispo de Matagalpa no quiere la paz y que se dedica a “sembrar el odio”
“Mi condena total a la actitud de este hombre porque no es sacerdote, mi condena contra este político, que lo que quiere es revivir los escenarios del 2018. Gracias a Dios, el pueblo de Nicaragua no lo va a permitir”, manifestó Navarro.
Las relaciones entre el régimen de Ortega y la iglesia Católica entraron en una etapa crítica luego del cierre por parte de Telcor de al menos ocho radioemisoras y del asedio contra el padre Uriel Vallejos, en la parroquia Divina Misericordia.