Defensores de derechos humanos: "Nicaragüenses están desesperados por salir del país"

Que 69 nicaragüenses hayan sido rescatados en un solo día rumbo a Estados Unidos en viajes incómodos y asfixiantes, muestra el nivel de desesperación que viven por salir del país. “Lo que está pasando es grave”, dice Gonzalo Carrión del Colectivo de Derechos Humanos Nicaragua Nunca+.    

Para el activista, el nivel de gravedad aumenta cuando se conoce que entre 28 nicas que viajaban apiñados en una falsa ambulancia por el estado sureño de Oaxaca, en México, iban nueve niños y niñas entre ellos y 14 mujeres.

“Es una barbaridad”, califica el defensor de derechos humanos. Este caso fue el segundo reportado este sábado. Ese mismo día, autoridades mexicanas interceptaron a otros 65 migrantes centroamericanos que viajaban hacinados en un tráiler en el norteño estado de Coahuila, fronterizo con Estados Unidos. De los 65, 41 son nicaragüenses.

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La detención de los nacionales fue parte de operativos emprendidos por el Instituto Nacional de Migración (INM) de la Secretaría de Gobernación (Segob), la Fiscalía y la Guardia Nacional. “Todo esto es un drama fuerte para esos menores”, recrimina el defensor de derechos humanos. “Queda claro que si las familias están dispuestos a arriesgarse de esa forma, es porque han visto que no hay otras formas se sobrevivir, están forzadas a salir así, a huir así”, afirma Carrión.

"¿COMO ALACANZARON 28 PERSONAS EN UNA AMBULANCIA?"

Jhoswell Martínez, del Observatorio de Derechos Humanos de la Asociación Nicaragüense para un Futuro Mejor, con sede en Costa Rica, se declara sorprendido por la cantidad de migrantes nicas que viajaban en la falsa ambulancia. “¿Cómo alcanzaron?”, es lo primero que se preguntó.

La respuesta la tiene Oscar, un nicaraguense de 37 años originario de Granada y que hizo una travesía de 20 largos y amargos días para llegar a suelo norteamericano. “Tenés que alcanzar y punto o te quedás a medio camino. Lo meten a uno a la fuerza, apenas podés respirar”, dice a Despacho 505 cuando se le preguntó sobre esa experiencia. Oscar viajó hasta cuatro horas en una camioneta cerrada, modelo Prado, apretujado con 16 personas más. “Pocas cosas son tan horribles como eso”, relató.       

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“Ningún niño debió estar ahí”, dice Martínez. “La verdad ni sus padres, ni sus madres. Ningún nicaragüense debería estar sufriendo lejos de casa y corriendo un peligro tan alto como ese”, agrega el también activista. “Deberían las autoridades (nicaragüenses) revisar lo que está pasando porque no son cienes, son miles los que sufren en estas travesías”, advierte.

CUATRO AÑOS HUYENDO

En sus homilías de este domingo, el Obispo de Matagalpa Rolando Álvarez y el Obispo Auxiliar de Managua, Silvio Báez, expresaron por separado la preocupación de la iglesia católica con el tema de las migraciones. Báez llamó a los creyentes a reflexionar sobre el sufrimiento que padecen quienes  hacen esos viajes peligrosos en busca de mejores oportunidades, mientras que Álvarez, señaló que mientras en el país no haya un Estado de derecho pleno, que respete los derechos humanos, la gente huirá.

Quienes han analizado el tema de las migraciones de miles de nicas en los últimos meses concluyen que una buena parte se ha ido para escapar de la feroz persecución gubernamental, mientras que otro gran grupo, lo hace porque no hay empleos y el costo de la vida en el país ya es insostenible.

Carrión lamenta que ya nos acerquemos a cuatro años y “la crisis política se mantenga”, “que la represión en vez de disminuir aumente” y que hayan autoridades que no estén conscientes de que deben resolver los problemas de la gente. “Tenemos un país que ha vivido cuatro años bajo terror, bajo crisis social, crisis económica, un poder que se ejerce no para crear empleos, ni estabilidad social, sino un poder para dominar a los demás”, criticó el defensor de derechos humanos.

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Carrión recordó que a partir de mayo del año pasado, los observatorios de migraciones de la región, empezaron a encender las alarmas al ver que ya eran miles los nicaragüenses que decidieron salir del país debido a la crisis. “Comenzamos a ver los secuestros de familias enteras en manos de mafias que se aprovechan de sus necesidades, gente que ha perdido la vida en esos viajes, claro que debe ser motivo de preocupación todo lo que estamos viendo”, dice Carrión.

“Hay un culpable de toda esta tragedia; el régimen que gobierna a un país sin aprecio a su gente”, señaló por su lado Martínez.