Según la Unidad Nacional, la reforma constitucional está dirigida «contra los desterrados, exiliados y comunidad de nicaragüenses en el exterior», sean políticos opositores o no.
La reforma, aprobada sin debate ni participación ciudadana, fue calificada por ADIS como una aberración legal y un “acto de violencia política, simbólica y emocional” contra miles de exiliados por la represión estatal.
El Parlamento aprobó otra reforma parcial a la Constitución que establece que los nicaragüenses "perderán su nacionalidad al adquirir otra nacionalidad".
"Tuvimos que hacer lo que corresponde y lo que no permitió Nicaragua, tampoco, que fue el reconocimiento de asilo, un derecho soberano único del Estado", dijo el presidente de Panamá.
Hugo Rodríguez había afirmado este jueves que presionaría a Ortega-Murillo para que en Nicaragua retorne la democracia y los derechos humanos. Además, se mostró a favor de expulsar a Nicaragua del Cafta-Dr.
El régimen acusó al embajador nominado por Biden de injerencista e irrespetuoso. La decisión de Ortega tensa más las relaciones entre Managua y Washington.
En la primera jornada se confirmó la exclusión de Cuba, Venezuela y Nicaragua por parte de Estados Unidos, país que lanzó una advertencia directa de sanciones a la dictadura en Managua.
El periódico New York Times reveló que Ortega busca fin a las sanciones y ofrece a cambio liberar a presos políticos. Este viernes, el Departamento de Estado confirmó acercamiento.
Los gobiernos de América coincidieron en que la dictadura ya no está abierta a ningún diálogo y piden considerar respuestas más concretas ante esta violación sin precedente.
La embajadora Julissa Reynoso incluyó a Nicaragua en una lista de países “donde la democracia no existe o está en declive” y dijo trabajar con España para promover un cambio.
Para este miércoles está en agenda la discusión de la cancelación de personería jurídica de 25 oenegés incluyendo a la de derechos humanos que mañana cumple 45 años de fundación.
El nuevo embajador orteguista presentó este viernes sus cartas credenciales en la OEA con un discurso en el que arremetió contra el organismo por ser un "instrumento de agresión" controlado por Estados Unidos.